El jefe del bloque del Partido Justicialista en el Senado, Miguel Ángel Pichetto, advirtió el jueves que el pedido de desafuero de Cristina Fernández de Kirchner, impulsado por el juez federal Claudio Bonadio, no es procedente debido a la falta de una sentencia firme.

Asimismo, el dirigente peronista informó que el pedido del juez será analizado una ves que se construya la comisión de Asuntos Constitucionales de la Cámara, lo que sucederá en febrero o marzo del año próximo.

La posición que tome Pichetto y los senadores que comprende su interbloque es determinante: los 25 miembros de su espacio alcanzan para bloquear cualquier votación de un pedido de desafuero en la Cámara de Senadores. De igual modo, si a ellos se les suman los ocho senadores que actualemente controla Cristina, el desafuero es inviable.

El senador rionegrino remarcó que el "el principio de desafuero de un senador o un diputado procede ante una sentencia firme”. Por ende, el caso de Cristina, al tratarse de una prisión preventiva, no tendría lugar dentro del Congreso. De todos modos, cabe analizar si el desafuero de Julio de Vido no constituye una situación similar.

Pichetto también mencionó que la expresidente "siempre estuvo a disposición de los requerimientos judiciales” en la causa de Irán-AMIA y que "no hay peligro de que se entorpezca la investigación de la causa”.

Por último, el jefe del bloque informó que el tema no será tratado en el Senado ya que el período de sesiones ordinarias ha finalizado. "No hay ninguna posibilidad”, enfatizó.