Parecería que, a pesar de los avances tecnológicos, los asientos de las clases económicas de las aerolíneas son cada vez más chicos. La incomodidad ya es algo natural pero hay algunos trucos para ganarle al malestar en largas horas de vuelo.

Elegir el mejor asiento: ¿silencio o comodidad?

Las características del asiento dependerán de los hábitos de cada uno. ¿Dormir sin que nadie moleste? El asiento de la ventana es el ideal para no ser interrumpido ni por los compañeros de fila, las azafatas, los carritos de comida, etc. Además, se puede controlar la luz que entra por la ventanilla y, lo mejor, apoyar la cabeza contra la pared de respaldo.

Si lo que se precisa es más espacio, la clave está en los asientos de las salidas de emergencia. No siempre están disponibles para elegirlos pero, en ciertas oportunidades, se pueden elegir por unos pesos más.

Un dato a tener en cuenta para evitar el ruido es que las primeras filas siempre se destinan a familias con bebés. Es conveniente evitar las últimas también por la cabina de los tripulantes que es donde preparan las comidas y están los baños.  

Trucos para dormir en el avión

No pasar frío

Para poder dormir cómodamente es fundamental no pasar frío durante el descanso. Y los aviones son lugares de temperaturas bajas. Es útil pedir una manta y una almohada apenas se sube al avión, no siempre hay disponibles para todos. Además, es útil llevar abrigo propio. Un buzo, un pantalón largo y medias, son claves para pasar la noche y poder conciliar el sueño.

Llevar ropa cómoda

La comodidad es primordial, considerando que ya de por sí el asiento es incómodo. Ropa apretada, accesorios molestos o telas de cuero están prohibidos si se quiere dormir cómodo. Las telas más livianas son ideales para poder moverse.

Zapatos fáciles de sacar y poner

Los pies se hinchan en los vuelos largo. Es una realidad. Estar sentado muchas horas, no moverse de posición y con los pies siempre abajo, provocan que la sangre no circule correctamente y se hinchen las piernas. La mejor forma de soportarlo, es ir con zapatillas fáciles de sacar para poder descalzarse y pasar el vuelo en medias. Una vez que se esté por desembarcar, es importante que la person se pueda volver a clazar a pesar de la hinchazón.   

Accesorios útiles para dormir

Tapones para los oidos: ayudarán a tener un entorno más tranquilo y silencioso y controlar el cambio de presión en aterrizajes y despegues.

Antifaz: tapar los ojos sirve para poder relajarse sin la intensidad de la luz.

Almohada de cuello: poder acomodar la cabeza es una clave para descansar correctamente sin contracturarse.

La mejor ubicación de las almohadas

Hay diferentes posiciones para las almohadas de viaje: en la cabeza, para apoyarla en la pared o el respaldo del asiento, o bien se puede colocar en la parte lumbar, para que descanse la espalda que queda sin apoyo en el asiento.

Con la almohada cervical se evitan malas posturas, se relajan los músculos del cuello y reducen la presión que se ejerce sobre el mismo.

¡Dato! Si se utiliza al revés, el mentón descansa sobre ella y se puede dormir sin que la cabeza caiga hacia adelante y se produzcan latigazos.

Trucos para dormir en el avión

No tomar alcohol

No es la mejor de las opciones porque el alcohol produce deshidratación. Una copita está bien, pero varias no.

Tomar algo caliente

Las bebidas calientes que no llevan mucha cafeína o teína son las mejores. Las infusiones de manzanilla, valeriana o el té de tilo llevan un aminoácido llamado glicina, que actúa como sedante sobre el sistema nervioso. Además, son una buena opción para hidratarse.

Trucos para dormir en el avión