Tragedia de Villa Devoto: la Justicia le otorgó a una tía paterna la guarda transitoria del único sobreviviente
Milo de Nastchokine tiene 18 meses y el martes pasado perdió a sus padres, a su hermana de 4 años y a sus abuelos en una vivienda de la calle Sanabria al 3700. Todas las víctimas inhalaron monóxido de carbono producto de un problema en el conducto de ventilación de una caldera, según las primeras pericias.
El Juzgado Civil N°102 de la Ciudad de Buenos Aires le otorgó a una tía paterna la guarda provisoria del bebé de 18 meses que sobrevivió a la tragedia de Villa Devoto, en la que el martes pasado murieron sus padres, sus abuelos y su hermana de 4 años por inhalación de monóxido de carbono.
Milo de Nastchokine quedará entonces a cargo de la mujer, que es profesional, propietaria de vivienda y no registra conflictos personales. Acompañada por sus hermanos, será la encargada de brindar contención y cuidado al menor durante esta etapa transitoria, mientras avanza el proceso judicial que definirá la tenencia definitiva.
El bebé fue encontrado el martes pasado en una habitación del primer piso de la casa donde ocurrió la tragedia, situada en Sanabria al 3700. Salvó su vida, según los peritos, porque había una ventana abierta.
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El resto de las víctimas, sus abuelos -dueños de la casa-, sus padres y su hermana fueron encontradas en la planta baja.
De acuerdo con las primeras pericias, el desgraciado hecho se produjo por un problema en el conducto de ventilación de una caldera que estaba ubicada en la cocina del chalet y que provocaba que los gases no salieran al exterior.
La pareja de Andrés de Nastchokine, de 43 años, y la francesa Marie Lanane, de 42, y sus dos hijos habían llegado al país el lunes pasado procedentes de Italia, donde vivían, para visitar a Demetrio De Nastchokine (79) y Graciela Just (74), padres del primero de los mencionados.
En paralelo, los abuelos maternos y un tío del niño viajaron desde Europa y ya se encuentran en la Ciudad de Buenos Aires.
El proceso de definición de la tenencia podría resolverse de manera más ágil si existiera acuerdo entre los parientes de ambas partes. Asimismo, la Justicia evaluará si es necesaria una prórroga de la guarda, una tutela o incluso una adopción, con foco en el bienestar emocional y social del menor.