Aunque el sector financiero aplaude las medidas del gobierno para controlar el dólar y festeja varios meses seguidos de estabilidad con tasas a la baja, la economía real se desploma y el sector industrial sufre el peor momento de la recesión que el Poder Ejecutivo afirma que está terminando. Los números alarman a los titulares de la UIA, que pidieron una reunión con el ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica.

El peor dato que dio a conocer Indec en los últimos días es el de la capacidad instalada, es decir, qué porcentaje de la maquinaria está siendo utilizada para la producción. Según el último informe de la entidad de estadística estatal, la misma se encuentra en 56%, el número más bajo desde el 2002.

PyMEs, comercios y capacidad instalada: los impactos de la recesión en la economía real

Gráfico: capacidad instalada industrial

Las consecuencias son notables: según los números que manejan los industriales, cierran por día 25 PyMEs y 80 comercios, mientras que otros se trasladan a la economía informal para evitar pagar cargas laborales y tributarias y, por ende, no tener que cerrar frente a una economía que, aseguran, no da respiro. En ese sentido, los empresarios hacen llegar a la Casa Rosada varios pedidos para morigerar el impacto de la recesión al ritmo del déficit cero.

La industria acumula ya tres años con un mal desempeño; en 2016, cayó el 4,6%, en 2017 recuperó apenas el 2,5% y en 2018 cayó el 5 %. Representa en tres años una caída de más del 7%, con un fuerte descenso en el nivel del empleo.

Los sectores que más sufrieron la recesión de la era Macri fueron la industria automotriz -que mostró en diciembre del 2018 una capacidad instalada de apenas el 25,6%-, el textil -cuyo nivel se encuentra en el 32,3% y el de metalmecánica, con el 42,8%.