Tras permanecer varias horas detenido en Caracas, el Gobierno venezolano liberó al argentino Pablo Carrasco, a quien el régimen chavista acusaba de participar en una presunta conspiración vinculada con las elecciones legislativas del próximo domingo.

El arresto de Carrasco, quien había ingresado a Venezuela con pasaporte italiano, había sido anunciado en las primeras horas de este jueves por el ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, quien precisó que el argentino, al que no identificó, había sido aprehendido junto a un búlgaro y a un español. 

Según informó TN, el argentino había viajado a Venezuela con el objetivo de hacer un trabajo relacionado con sistemas y ciberseguridad.

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"Un búlgaro y uno argentino, y por ahí va la cosa", remarcó Cabello durante su programa en el canal estatal Venezolana de Televisión, sin aportar detalles sobre las imputaciones ni las circunstancias del operativo. "Si vienen para acá a conspirar, los vamos a agarra. Sépanlo", advirtió.

Las detenciones generaron preocupación en la comunidad internacional, que en su mayoría no reconoce como legítimo el Gobierno de Nicolás Maduro, al que se acusa de haber perpetrado un fraude en las elecciones presidenciales del pasado 28 de julio.

El régimen venezolano mantiene secuestrados, además de ciudadanos del país caribeño, a más de 120 extranjeros por supuestos actos desestabilizadores, entre ellos a Nahuel Gallo.

El gendarme argentino fue detenido en la ciudad de Táchira el 8 de diciembre último y acusado por el Ejecutivo de ese país de participar en un plan para asesinar a la vicepresidente del país caribeño, Delcy Rodríguez. Desde entonces, Maduro solamente emitió una prueba de vida, el pasado 3 de enero, con una imagen en la que se ve al argentino caminando en medio de una prisión.