
“Me hace acordar a Milagro Sala": Morales destrozó a Milei
El precandidato a presidente por la Unión Cívica Radical advirtió que “sería catastrófico” que una persona “desquiciada” se haga cargo del país.
"Necesitamos un cambio de régimen que haga que el país dé una vuelta de 180 grados, con dos desafíos fundamentales: orden social, que ordene y priorice las demandas múltiples de manera armoniosa, y orden macroeconómico, con balance fiscal, más programa antiinflacionario, acceso al financiamiento genuino, política de ingresos y reformas", sostuvo el actual gobernador de Jujuy.
El presidente de la UCR afirmó que los objetivos de estos dos desafíos son "reducir la inflación a niveles más razonables, eliminar la brecha cambiaria en el primer año, formalizar la economía y simplificar (y en algunos casos reducir) la carga tributaria, atendiendo a las realidades de la pequeña empresa y las economías regionales".
Además, se "incentivará la inversión y la creación de trabajo registrado con una agenda de desarrollo" porque "una estabilización sin desarrollo no sólo es inequitativa, sino que también es insostenible más allá del primer año, y esto la hace poco creíble".
Morales prometió que habrá "incentivos a la inversión, la producción y la exportación, para que el sector privado genere riqueza y trabajo".
"Hay un prejuicio de los radicales con la gestión y la economía, que desconoce los cambios profundos en el partido en los últimos años", afirmó.
En ese sentido, se puso de ejemplo: "Las pruebas están a la vista: la gestión radical en las provincias. Estas no son promesas en el aire, es lo que hicimos en Jujuy, una provincia a la que todos pensaban inviable y que tiene un presente y un futuro lleno de posibilidades".
Morales enfatizó: "Pasamos de una provincia dividida, parcialmente tomada por una organización paraestatal con terminales políticas a una provincia donde se respetan las libertades e impera la ley".
Asimismo, agregó: "Pasamos del déficit a la gestión virtuosa de las cuentas públicas, con ahorros reinvertidos en incentivos la inversión en capital físico y humano y en educación".
En esa línea, subrayó: "Desarrollamos actividades desatendidas: turismo, energía, minería, cannabis, promoviendo la acción del sector privado. El Estado en algunos casos acompaña pero no gestiona ni se apropia de la actividad".
Morales remarcó: "Mejoramos la gestión de las empresas públicas esenciales y privatizamos aquellas que consideramos que no debían seguir en cabeza del Estado".
El precandidato a presidente afirmó que "el Estado no tiene recursos y la capacidad para impulsar el crecimiento a espaldas del sector privado".
"Tenemos que pasar de esta coalición anti exportadora donde productores y trabajadores se pelean por los recursos menguantes del Estado a una coalición exportadora basada en la estabilidad macro y la competitividad micro", agregó.
Al mismo tiempo, aclaró: "Por competitividad no decimos salarios bajos o recorte prematuro de impuestos que desfinancien el Estado y provoquen la próxima crisis, sino: Formación profesional para una mayor productividad laboral".
También abogó por crear condiciones para la "inversión en máquinas, tecnología y procesos", como así también la "reducción de costos logísticos y conectividad digital en todo el país".
Morales propuso una "integración inteligente al mundo" y afirmó: "Si recuperamos las oportunidades perdidas, podemos subir un escalón rápidamente. Si invertimos y nos integramos al mundo, podemos crecer sostenidamente".