Finalmente, Gerry Rice, vocero principal del Fondo Monetario Internacional (FMI), confirmó que representantes del organismo mantendrán un encuentro con el ministro de Hacienda, Hernán Lacunza

Desde el entorno del funcionario dijeron a El Canciller que, por el momento, el ministro no tiene previsto viajar a Nueva York para asistir a la apertura de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) que se realizará el 24 de septiembre y donde el presidente Mauricio Macri dará un discurso, al igual que varios líderes mundiales. 

Justamente ese día Lacunza emprende el viaje hacia Estados Unidos, con la agenda ya confirmada con referentes del FMI, con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial. “No es una reunión de revisión”, dijeron a este medio en referencia al encuentro con Alejandro Werner, director del Hemisferio Occidental del FMI, y Roberto Cardarelli, jefe de la misión técnica en la Argentina.

Pero más allá de eso, la quinta revisión del programa stand-by y el envío de los 5.400 millones de dólares correspondientes a ese examen serán parte de las conversaciones.

La incertidumbre del Gobierno nacional estaba en alza porque, hasta el momento, la reunión no estaba confirmada: el viaje del titular de Hacienda solo había sido ratificado para el aniversario del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y para otro encuentro con referentes del Banco Mundial. 

Al ser consultado sobre si el FMI había infringido alguna regla propia en el caso del crédito que le otorgó a la Argentina o en el seguimiento del programa, Rice aseguró que “no es el caso. El objetivo del FMI ha sido tratar de ayudar a las autoridades a estabilizar la difícil situación y permitir un retorno de la confianza que allane el camino para el crecimiento en el futuro. Ese ha sido nuestro enfoque, y esa es nuestra prioridad".

"Todos reconocemos las complejas condiciones de los mercados y las incertidumbres en las políticas", dijo el vocero en otro tramo.

El encuentro se dará luego del anuncio de Lacunza de renegociar el acuerdo con el Fondo y “reperfilar” la deuda argentina. En su última comunicación el organismo se refirió a esas restricciones y las calificó como "medidas de gestión de flujos de capitales" dirigidas a "proteger la estabilidad cambiaria y a los ahorristas".