En plena campaña electoral y con la crisis económica y social de fondo, la Cámara de Diputados tuvo como centro de escena el debate por la prórroga de la ley de Emergencia Alimentaria por amplia mayoría. En una sesión que se acordó que fuera de corta duración por la sensibilidad del tema, los legisladores evitaron chicanas e incluso acordaron que solo hable un diputado por bloque, de acuerdo a lo que dijo Emilio Monzó al inició de la sesión.

Con 222 votos afirmativos y una abstención, el proyecto obtuvo media sanción y ahora pasará al Senado.

Desde el oficialismo dijeron a El Canciller que "al ser una prórroga del decreto 108/2002 con un aumento con asignación específica no nos interpusimos, no pusimos ninguna condición para su aprobación ni nos opusimos a ningún artículo". "Algunos legisladores vinieron con discursos incendiarios, pero todos asumimos que el Congreso tiene que llevar calma porque la violencia en la calle se tiene que diluir", dijeron a este medio desde el recinto.

Por Cambiemos, el referente fue Héctor "Toty” Flores.  "Tenemos que ser sensibles a este planteo que hace la oposición, pero también tenemos que decir que es necesario empezar a pensar cómo salimos de esta situación, porque hubo emergencia social cuando la economía no crecía, pero también cuando crecía a tasas chinas y la soja estaba 600 dólares", aseguró.

Carlos Castagneto, del Frente para la Victoria, lanzó: "Llegamos acá porque el Gobierno no quiere tomar la decisión. Este proyecto es por eso, porque no quiere ver una realidad que la Argentina está pasando". Previo a la sesión, Agustín Rossi, jefe de la bancada, había dicho que "desde la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), hasta la CGT, pasando por los movimientos sociales, gobernadores, intendentes, todos han hecho este reclamo y nosotros estamos dando respuesta a eso".

Cecilia Moreau del Frente Renovador (FR) explicó que "solo este año dos millones de personas cayeron bajo la línea de pobreza. Está bien que haya números, pero con esto no alcanza. Hay que poner el cuerpo. Nunca se sentaron con los supermercadistas para regular los precios. En la Argentina hay hambre, no porque falten alimentos, sino porque sobra inmoralidad".

Daniel Arroyo, del bloque Red por Argentina, dijo que la aprobación de este proyecto de emergencia "es un acto administrativo que ayuda en el medio de una crisis a acelerar la licitación de alimentos, lograr que haya más atención alimentaria".

Leonardo Grosso, uno de los impulsores de la emergencia alimentaria y referente del Movimiento Evita, indicó: "Estamos planteando esta ley porque el país está en emergencia. Cualquier política pública para combatir el hambre llega tarde. Algunos se regodean por dar quórum o hablan de que esta ley es un problema fiscal, esto es un problema de fondo que hay que solucionar".

Tal y como había adelantado El Canciller, el oficialismo llegó al recinto con la voluntad de dar quórum y dar el debate, algo que hasta los últimos días no estaba confirmado.

El proyecto de Emergencia Alimentaria lanzado por legisladores del Frente de Todos propone un aumento del 50% en las partidas presupuestarias de alimentación y nutrición y plantea su actualización cada tres meses.