Primero fue el diario británico Financial Times y ahora el periódico norteamericano New York Times. En una columna de opinión, Mark Weisbrot (codirector del Centro de Investigación Económica y Política en Washington) analizó la situación de la Argentina, se refirió al fracaso de las políticas económicas del gabinete de Mauricio Macri, destacó los indicadores sociales de la década kirchnerista y remarcó: "no está claro el motivo por el cual deberíamos temerle al kirchnerismo”.

A lo largo de la columna, Weisbrot intenta responder quién es el culpable de la crisis económica que enfrenta nuestro país tras el resultado de las primarias y la derrota de Macri frente a Alberto Fernández por un "margen inesperado” del 15,6%

"La coalición de Fernández atribuye su victoria a las políticas económicas fallidas de Macri, pues lo consideran culpable de la crisis económica, la recesión y la inflación elevada (…) Macri afirma que el miedo a un futuro gobierno kirchnerista fue el culpable de la turbulencia financiera tras las elecciones (…) El actual presidente argumenta que tanto los mercados como el pueblo deberían temerle a este resultado”, dice el especialista en política y economía latinoamericana. 

Weisbrot diferencia la derrota electoral de un gobierno "cuyas políticas económicas han fracasado de manera evidente” con la victoria del Frente de Todos, que proviene de "un crecimiento económico sólido y ampliamente compartido”. Incluso, va más allá: "Los gobiernos de los Kirchner estuvieron entre los más exitosos del hemisferio occidental”

El autor enumera indicadores económicos de las gestiónes kirchneristas como la disminución de la pobreza, el aumento del PBI per cápita y la reducción de desempleo, entre otros. Luego, hace una marcada diferenciación con los cuatro años de gobierno de Macri citando la debacle en los indicadores económicos como el aumento del desempleo, una recesión casi constante y una inflación elevada y, finalmente, se pregunta: "¿Qué tanto de esta crisis económica y mal desempeño es responsabilidad de su predecesora?”. 

"Millones de argentinos recuerdan la última depresión y el papel que desempeñó el FMI. Muchos también recuerdan la mejora tan rápida que hubo en la vida de la gente a lo largo de la década siguiente. Esa memoria y conciencia colectivas quizá ahora determinen el resultado de este debate recurrente sobre la economía y, con ello, la elección general del 27 de octubre y posiblemente gran parte del futuro de Argentina”, concluye Weisbrot.