Una anomalía hidroacústica: agotan las esperanzas en un ruido detectado por Estados Unidos

Comienza el octavo día de un hecho inédito en la historia argentina y el caso sigue igual que al comienzo. Lo que no sigue igual son las esperanzas de encontrar con vida a los 44 tripulantes del Subamarino ARA San Juan perteneciente a la Armada Argentina. Disminuyen hora tras hora.

A las 07:30 horas del miércoles 15 de este mes se estableció comunicación por última vez en la zona del golfo San Jorge, en Chubut. Desde ese momento poco se sabe sobre la embarcación.

Anomalía hidroacústica

En el último parte oficial de la Armada, el vocero y capitán Enrique Balbi informó que detectaron de manera oficial "una anomalía hidroacústica, un ruido", en la zona donde se perdió la comunicación. El mismo correspondería a algunos minutos después de la incidencia.

Una anomalía hidroacústica: agotan las esperanzas en un ruido detectado por Estados Unidos

"Tras recolectar toda la información y un análisis exhaustivo centralizado en los Estados Unidos y que tomó su tiempo, hoy recibimos un indicio oficial que corresponde al miércoles 15 por la mañana y corresponde a una anomalía hidroacústica, 30 millas al norte de la última posición conocida, a las 7:30 de la mañana", informó Balbi.

A su vez, informó que "se estan desplegando buques de la Armada Argentina y estarían llegando el miércoles (ayer) por la noche", en tanto añadió que "estamos disponiendo de un avión de la Marina de Brasil que detecta anomalías magnéticas".

Teoría de la explosión

Manteniendo la compostura y el temple que había enseñado en los anteriores partes, Balbi se mostró cauto a la hora de referirse a la "anomalía hidroacústica" como algo más que "un ruido".

Ante la reiterada consulta de los periodistas, el vocero eligió "no hacer conjeturas" respecto al sonido y evitar relacionarlo con algún tipo de explosión, como sugirireron los reporteros. Desde Clarín citaron fuentes extraoficiales vinculadas a la Armada para imponer esta teoría.

Últimas horas

A medida que transcurren las horas, el oxígeno del navío disminuye y con él las esperanzas de encontrar con vida a los 44 tripulantes que lo abordaron con destino a Mar del Plata. Más de 25 naves de 14 países están implicados en la búsqueda y el rescate del submarino.

En la Base Naval de Mar del Plata, los familiares pierden poco a poco las esperanzas entre la incertidumbre y la desolación de un panorama que oscurece minuto a minuto.

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