Roberto Lavagna no anunció formalmente que peleará por la presidencia, pero lo tiene decidido. Con ese objetivo, el exministro de Economía encomendó a su equipo que busque un lugar donde empezar a concentrar a los dirigentes para mantener reuniones de trabajo de cara a la construcción de su propuesta electoral y está previsto que la semana que viene inaugure su búnker en el centro porteño.

Será en un edificio ubicado en la calle Paraguay, entre Cerrito y Libertad, a una plaza de distancia del teatro Coliseo. Allí tendrán reuniones los equipos técnicos que trabajan en la pataforma de Lavagna y se conformará la "junta promotora" de la campaña del economista, integrada por varias figuras conocidas dentro del peronismo y, en particular, algunos dirigentes cercanos a Florencio Randazzo. Se espera que se sumen también representantes del socialismo, del radicalismo y del GEN.

Esa junta promotora está integrada, por ahora, por el ex embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Rodolfo Gil, el ex ministro bonaerense Alejandro "Topo" Rodríguez y el ex presidente de la Cámara de Diputados Eduardo Camaño, entre otros. También forman parte el diputado nacional Eduardo "Bali" Bucca y la excandidata a senadora Florencia Casamiquela, dos figuras muy cercanas al exministro del Interior y Transporte del kirchnerismo, que por ahora mantiene su silencio. 

El equipo que promueve la candidatura de Lavagna lo completan el exsenador provincial Juan José Amondarain, la exdiputada provincial Valeria Amendolara; el exdiputado bonaerense Fernando Rozas y el dirigente peronista Eugenio Casielles. La presencia de dirigentes bonaerenses en la junta promotora tiene un motivo: la Provincia de Buenos Aires es el primer lugar donde plantará bandera el lavagnismo, que ya trabaja en el diseño de una estructura territorial que cubra los 135 municipios bonaerenses. Más tarde buscarán repetir ese esquema en todas las provincias. 

Quién es quién

Rodolfo Gil es uno de los hombres de máxima confianza de Lavagna e integra, junto con Carlos Hourbeigt, la mesa chica del economista: lo acompañan a todas las reuniones políticas y son sus principales asesores. Bucca no solo es un nexo con Randazzo, también lo es con intendentes, con gobernadores y con Marcelo Tinelli: construyó una gran relación con el conductor cuando gobernó Bolívar, la ciudad donde nació y se crió. La otra pata de la relación con Randazzo es Casamiquela.

Rodríguez, exministro de Asuntos Agrarios de Daniel Scioli, le aporta un valor clave: conoce el funcionamiento de la provincia. Camaño (expresidente de la Nación por algunas horas) y Amondarain (dirigente del Frente Renovador) trabajan cerca de Miguel Ángel Pichetto y Casielles es un dirigente cercano al diputado nacional Marco Lavagna, hijo del ex ministro. Rozas, por su parte, es uno de los promotores del peronismo federal en Buenos Aires.