La Policía de Seguridad Aeroporturia (PSA), la Gendarmería Nacional y la  Unidad Antiterrorismo de la Dirección de Investigaciones de la Policía de Córdoba detuvieron, en la madrugada de ayer, a un hombre y una mujer de nacionalidad chilena en un hotel de Palermo, sospechados de integrar una supuesta célula terrorista mapuche que planeaba poner una bomba en el Congreso de la Lengua que se celebró en Córdoba.

Esas fueron, al menos, las explicaciones que dieron las fuerzas y el Ministerio de Seguridad de Patricia Bullrich para justificar la detención de la arquitecta Gabriela Medrano Viteri y el director de arte Felipe Zegers, que habían llegado el domingo a Buenos Aires desde la capital cordobesa. Pero los efectivos de la PSA y Gendarmería no contemplaron un detalle: los detenidos habían sido invitados al Congreso de la Lengua.

La explicación de las fuerzas de seguridad fue que hallaron un paquete sospechoso en el hotel cordobés en el que se habían hospedado, que consistía en un dispositivo de bomba, pero sin la carga explosiva. "Estos grupos actúan en células. Unos tienen una parte de la bomba, otros cuentan con otra parte y otros tienen otra parte. Nunca uno tiene todo, por las dudas que le caiga la Policía", señalaron desde la policía cordobesa a La Voz del Interior.

Por su parte, desde el Ministerio de Seguridad indicaron a La Nación que en la mañana del domingo 31 una persona dejó un paquete para un hipotético huésped en un hotel de la calle Belgrano 131, en el centro de la ciudad de Córdoba y, por las sospechas que generó en el personal, se llamó a la brigada antiexplosivos de la Policía, que intervino junto al grupo antiterrorista de la Gendarmería Nacional.

El juez de la causa, Hugo Vaca Narvaja, explicó a El Canciller que lo que se halló fue un maletín que contenía una batería de celular modificada para activar eventualmente un dispositivo de detonación, que podría servir para hacer explotar una bomba o para lanzar papel picado, pero que la detención se debió a la situación excepcional del Congreso de la Lengua, que todavía se estaba desarrollando cuando el paquete fue encontrado en el hotel.

"Hay un protocolo que determina cómo actuar ante estas situaciones", argumentó el magistrado para justificar la detención preventiva de Medrano Viteri y Zegers, que actualmente se encuentran privados de su libertad en la Alcaidía del Palacio de Tribunales, un lugar que recibió reiteradas denuncias por parte de organismos de derechos humanos por sus condiciones de detención.

Según la periodista Carolina Ortega, amiga de ambos, ese "paquete sospechoso" era en realidad parte de la intervención artística que la pareja había realizado en el evento. "¡Tienen en cana e incomunicada a una de las arquitectas más brillantes de su generación por una de las cajas de intervención urbana!", escribió en su cuenta de Twitter.

El juez señaló, en ese sentido, que ya se libraron oficios a los organizadores del Congreso para determinar si efectivamente los detenidos habían sido invitados y adelantó que, si se trató de un malentendido, la fiscal a cargo de la investigación pedirá mañana que ambos sean liberados.

Según informó La Voz, la detención fue obra de la propia ministra Bullrich, que habló por teléfono con el ministro de Gobierno de Córdoba, Carlos Massei, horas antes de que los policías cordobeses se comunicaran con sus pares de Gendarmería y la PSA para diagramar un operativo conjunto.