Alfonso Prat-Gay tiene decidido competir por la gobernación de Tucumán. El exministro de Hacienda así lo expresa en sus redes sociales y en cada entrevista que da. En el Poder Ejecutivo también lo quieren de candidato: las encuestas que maneja Jaime Durán Barba lo ubican a la par del actual gobernador, Juan Manzur, y del exmandatario provincial José Alperovich, el candidato de Cristina Kirchner.

Para encarar su campaña, Prat-Gay tiene claras dos cosas: la economía va mal y Tucumán es una provincia opositora. Por eso en los últimos días decidió mostrarse crítico de la gestión económica del Gobierno y aseguró que los mercados ven con malos ojos la estrategia de polarización extrema con Cristina Kirchner. "Tienen miedo a Cristina y a los próximos cuatro años, y miedo a la estrategia que elige el Gobierno para aumentar sus chances de ganar la reelección, porque el Gobierno cree que a Cristina se le gana fácil", advirtió.

A pesar de su ambición por ser gobernador, el economista debe lidiar en esa provincia con las aspiraciones de otros dos dirigentes de relativo peso en Cambiemos: el diputado José Cano, extitular del Plan Belgrano y excandidato a gobernador en 2015, y la senadora Silvia Elías de Pérez. El Gobierno quiere evitar que una eventual interna entre ellos afecte a Mauricio Macri en su intención de ir por un segundo mandato, por lo que ya tomaron cartas en el asunto.

El ministro del Interior, Rogelio Frigerio, viajó en las últimas horas a Tucumán con la excusa de inaugurar obras en la ciudad de Concepción, que demandaron una inversión del Gobierno nacional de más 32 millones de pesos, pero el objetivo final fue otro: mostrar que Cambiemos está unido en la provincia, la de mayor densidad de población del norte argentino.

Frigerio logró, al menos, una foto con todos juntos (menos con Elías de Pérez). Prat-Gay, Cano, el diputado Facundo Garretón y el subsecretario de Interior, Domingo Amaya, participaron de una cena junto al ministro y otros referentes de los distintos partidos de la alianza oficialista (Pablo Walter, del PRO, y los intendentes Roberto Sánchez y Sebastian Salazar, de la Coalición Cívica, entre otros). 

Pero las diferencias existen. En los últimos días, Cano aprovechó una frase de Prat-Gay que generó polémica y se ubicó en un lugar más "progresista" que el exministro. "No creo que la Educación Sexual Integral sea una prioridad", dijo el expresidente del Banco Central en una entrevista reciente, y el diputado salió al cruce: "Sigue siendo una prioridad para que hagamos una provincia distinta".

Días después, fue mucho más duro y apuntó directo contra las aspiraciones del economista y su estrategia electoral: "Venir cada dos meses, sacarse una selfie y decir que recorremos la provincia, no aporta mucho".