En las últimas 24 horas, el Indec difundió dos datos que encendieron alarmas en el Gobierno. Por un lado, la inflación mayorista trepó en octubre un 3% y acumula un 71,1% en lo que va del año. Por otro, el organismo informó que una familia tipo necesita más de $24 mil mensuales para no ser pobre.

A pesar de los números negativos para la sociedad, en el Gobierno no fueron tan mal recibidos: la inflación mayorista publicada ayer por el instituto estadístico está lejos del 16% registrado en septiembre, debido a la apreciación del peso que logró el Banco Central con las medidas implementadas por Guido Sandleris.

La variación tan significativa entre un mes y otro se debe a que el indicador muestra principalmente precios de insumos industriales, que son sensibles a la dinámica del tipo de cambio.

Sin embargo, la suba de precios mayoristas en los ùltimos 12 meses fue de 76,6%, casi 30 puntos superior a la minorista, que en el acumulado entre octubre de 2017 y octubre de 2018 acumuló 45,9%.

Esta diferencia refleja que los costos subieron, en general, por encima de la capacidad de los comerciantes de remarcar los precios finales, debido a la fuerte caída del consumo. No obstante, octubre fue un mes en el que se dio la inversa, ya que los precios minoristas treparon 5,4%.

Hoy, además, el Indec publicó la valorización mensual de la canasta básica alimentaria y de la canasta básica total en el Gran Buenos Aires, que arrojó que una familia tipo necesitó de $24.241,17 para superar el umbral de pobreza en octubre de este año.

Según el informe dado a conocer hoy, el mes pasado tanto la variación mensual de la canasta básica alimentaria (CBA) como de la canasta básica total (CBT) con respecto a septiembre fue de 7,5%. Así, las variaciones interanuales de la CBA y de la CBT resultaron del 51,5% y 54,6%, respectivamente.