En medio de una recesión económica sin fecha de vencimiento que continúa golpeando a los pesificados, el INDEC informó que la Industria se desplomó en un 11,5% en septiembre y reflejó la caída más pronunciada de los últimos 16 años.

La estadística representa un coletazo de la corrida cambiaria de fines de agosto, cuando el peso argentino se devaluó en un 26%, así como de la suba de la tasa de interés y la aceleración de la inflación. Los sectores que más sufrieron el impacto fueron el textil -reducción del 24,6%-, los productos editoriales -21,6%- y la metalmecánica -20,5%-. 

La industria alimenticia, la que más injerencia tiene en la medición, se redujo en un 3,2% respecto del mes anterior. El sector automotriz, uno de los más favorecidos en el año -creció 10,3% interanual-, se desmoronó en un 15,7%, a raíz de un marcado retroceso de la demanda interna.

Desde el 2002 que la contracción de la producción manufacturera no era tan prominente -en ese entonces, el indicador arrojó una baja interanual del 12,2%-. En el año, acumula un declive del 2,1%. 

Por otra parte, la Construcción sufrió el peor retroceso en los últimos 20 meses, al caer 4,2%. Si bien el sector muestra una suba del 6,4% en los primeros nueve meses, propiciado por el impulso de comienzos de año, el último trimestre proyecta un mayor descenso en el nivel de la actividad, como consecuencia de los atrasos en la cadena de pagos y la inestabilidad de los precios.