La postura de la Iglesia sobre la despenalización del aborto es conocida. Desde el Vaticano llegó un mensaje al Congreso Nacional en los tiempos en que se llevaba a cabo la votación con la súplica para que no se apruebe el proyecto que el propio Mauricio Macri puso sobre la mesa.

Después de lograr media sanción en Diputados, el Senado le puso un freno a la iniciativa, aunque el debate quedó latente en la sociedad. En este contexto, el papa Francisco fue a fondo con la postura y realizó una frase que recibió un sinfín de críticas al comparar el aborto con recurrir a un sicario.

Así, la máxima autoridad eclesiástica dijo que la interrupción del embarazo es como quien "contrata a un asesino a sueldo para resolver un problema”. "¿Pero ¿cómo puede ser terapéutico, civil o simplemente humano un acto que suprime la vida inocente e indefensa en su inicio?", preguntó en la audiencia general en la Plaza San Pedro.

En este sentido, Francisco agregó que los padres, en estos casos dramáticos, necesitan una verdadera cercanía, de verdadera solidaridad, para afrontar la realidad superando los comprensibles miedos y que, sin embargo, lo que reciben son rápidos consejos para interrumpir el embarazo".

La postura del Papa se convirtió en las redes sociales en el eje de las conversaciones, donde los usuarios de diferentes partes del mundo cuestionaron su frase sobre el aborto. Hace algunas semanas, había "recomendado” llevar a los niños al psiquiatra si manifiestan "conductas homosexuales”.

"¿Es justo contratar un sicario para resolver un problema?”

"¿Es justo contratar un sicario para resolver un problema?”, insistió y sorprendió hasta algunos de los suyos con la declaración. 

Los escándalos de los sacerdotes abusadores de Chile también pusieron a la Iglesia en jaque, que tardó en responder sobre los casos que sacudieron a la región y generaron conmoción en todo el mundo.

No es un buen momento para Francisco, con el reclamo de la sociedad para que modernice una institución que no tiene intenciones de hacerlo. Hace poco más de un mes, el periodista Marcelo Longobardi decidió compararlo con el presidente Macri al considerar que ambos personajes tienen que enfrentar problemas que no crearon, pero le explotaron en la cara.