El empresario y exdiputado Francisco De Narváez ayer repartió su sonrisa a diestra y siniestra en la cúpula del CCK. Rodeado de empresarios, políticos y personalidades, volvió a amigarse, al menos por un rato, con la rosca política. Se saludó afectuosamente con Marcelo Mindlin, de Pampa Energía; Cristiano Ratazzi de FIAT; con Gabriel Martino, del HSBC y con Emilio Monzó, presidente de la Cámara de Diputados. Tenía un buen motivo: el grupo De Narváez, junto a la firma L Catterton, compraron la icónica marca de lencería femenina, Caro Cuore.

Todavía están frescas sus palabras de despedida del mundo político, en febrero de este año, luego de una reunión con Macri en Olivos: "La política es un ciclo que cerré para siempre". En su momento, la foto con el presidente generó suspicacias. Aunque el propio De Narváez en una entrevista con La Nación se encargó de cerrar la puerta a perpetuidad:  “para siempre quiere decir para siempre", sentenció. Desde entonces su presencia mediática se esfumó y volvió a su perfil empresario.

El gambito político del empresario siempre fue haberle ganado a Néstor Kirchner en el 2009, con las candidaturas testimoniales de fondo. Su caja también fue un plus a la hora de afrontar fastuosas campañas. Viejo socio político de Mauricio Macri desde el la Fundación Creer y Crecer, no pudo formalizar esa alianza con ahora presidente para el 2011. En las últimas elecciones del 2015 confluyó como precandidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires en el Frente Renovador de Sergio Massa, pero se bajó y luego apoyó a Daniel Osvaldo Scioli. Al tiempo renunció a su banca en medio de la primavera macrista.

“CaroCuore es una marca con un posicionamiento único y altamente valorada por sus clientes. Con esta primera adquisición, damos un primer paso de un ambicioso plan de crecimiento en el sector de indumentaria a nivel regional”, sostuvo Francisco de Narváez, presidente del Grupo de Narváez, al anunciar la adquisición.

L Catterton es la otra pata del negocio. Ya había hecho negocios con el Grupo De Narváez con la compra de la marca Rapsodia. Su Managing Partner es Dirk Donath, un empresario estadounidense que adoptó estas tierras para desarrollar sus negocios. De su paso por la consultora McKinsey conoce a los actuales vicejefes de gabinete Mario Quintana y Gustavo Lopetegui, jugadores centrales del gobierno de Mauricio Macri. La firma concentra inversiones por u$s 14.000 millones en empresas de consumo masivo a nivel mundial.