La renegociación del préstamo con el Fondo Monetario Internacional asegura el blindaje financiero para el oficialismo de cara al año electoral. Aunque la receta que viene con los 57 mil millones de dólares contempla ajuste y recesión, el Gobierno posee la cantidad de divisas suficientes para pagar los intereses de deuda sin pedir más dinero a los mercados globales. De esta manera, Mauricio Macri pateó el peor de los problemas para su segundo mandato o para el mandamás que tome el bastón presidencial después de él.

Además de la expansión del préstamo inicial -que pasó de 50 a 57 mil millones de dólares-, lo más importante que anunció Nicolás Dujovne junto a Christine Lagarde es que se adelantarán casi todos los fondos hacia 2019. De esta manera, el ratio deuda/PBI crecerá exponencialmente el año que viene. ¿Qué va a dejar Macri cuando termine el año electoral?

La pesada herencia de Macri


Préstamo del FMI: el costo del blindaje financiero y la herencia que deja Macri después de 2019

Aunque las cifras pueden variar, la deuda representará entre 80 y 90 puntos del PBI que, además, cayó en dólares más del 40 por ciento desde que Macri llegó a la Rosada, producto de la megadevaluación acompañada de una caída de la economía.

Pero el que venga después no sólo no podrá tomar demasiada deuda, ya que es poco probable que los mercados quieran prestar su dinero a una economía frágil cuyos haberes son mucho más altos que los del resto de la región. Además, devengarán los pagos de las cuotas del Fondo y otros préstamos pedidos a Wall Street.

De esta manera, aunque el Gobierno lograría evitar la cesación de pagos en el año electoral y cambiar la historia que dice que nunca un partido no peronista llegó a terminar un mandato completo, se deberá más al blindaje empujado por Donald Trump y provisto por madame Lagarde que a la robustez de la gestión amarilla. Y deja, además, una pregunta con una respuesta que no convence a nadie: ¿cómo se evita el default después de 2019?