En su discurso de 10 minutos ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, Mauricio Macri hizo especial hincapié en ratificar la soberanía del país sobre las Islas Malvinas, al tiempo que repudió las violaciones de Derechos Humanos efectuadas por el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.

Luego de reconocer la gran relación que edificó con el Reino Unido desde que desembarcó en el Sillón de Rivadavia, el Presidente catalogó como "legítimos" e "imprescriptibles" los derechos de la Argentina sobre el territorio conflictivo.

Posteriormente, situando el énfasis en la "paz" y la "democracia" como valores concebidos por el Mercosur, afirmó que denunciará ante la Corte Internacional de La Haya, junto a países de la región, los crímenes de lesa humanidad que se cobraron la vida de más de 150 venezolanos en manifestaciones opositoras durante 2017.

A su vez, respecto al éxodo masivo que afronta Venezuela por sus carencias en condiciones humanitarias, indicó que el territorio argentino ya ha recibido a 130.000 caribeños en los últimos dos años.

Sin detenerse en su disertación, continuó enfocándose, en sintonía con la preocupación generalizada, en el rechazo sobre el terrorismo mundial. En este sentido, les solicitó a las autoridades iraníes que cooperen para que los imputados por el atentado puedan ser indagados y terminen finalmente tras las rejas.

Luego de reafirmar la invitación al G20 -a realizarse en noviembre en la ciudad de Buenos Aires-, sentenció que los pilares de su gobierno atraviesan la erradicación de la pobreza -el jueves tendrá un revés importante con el nuevo índice del INDEC-, el cambio climático y la igualdad de derechos para con las mujeres.