Para Independiente se acerca el inicio de una nueva temporada y las expectativas son altas. Tras el logro de la Copa Sudamericana en diciembre del 2017 y un andar con altibajos durante el primer semestre del 2018, la segunda mitad del año trae muchos argumentos para comenzar a visualizar un horizonte lleno ilusión.

Es un hecho que el club encontró en Ariel Holan un capitán al cual apostar para construir y desarrollar proyectos más ambiciosos. Y se ha trabajado en consecuencia: al DT le firmaron un contrato por cuatro años, hasta diciembre del 2021, coincidente con la finalización del segundo mandato de Hugo Moyano como presidente.

Con gran poder de decisión sobre el aspecto deportivo, el cargo tiene mayores semejanzas con el que ocupan los entrenadores en otras partes del mundo, la Premier League por caso. Como José Mourinho en el Mánchester United o Pep Guardiola en el City, Holan decidirá sobre infraestructura al servicio del primer equipo, la reserva y sus inferiores; además de ser una consulta permanente a la hora del armado de los planteles y el manejo del presupuesto destinado al fútbol profesional, ya sea para las compras, las inversiones o las salidas.

Subir la apuesta, el objetivo del Independiente de Holan

Como pocas veces sucedió en Independiente, los refuerzos llegaron en tiempo y forma, previo al inicio de la pretemporada y sin novelas de por medio. Además, han sido las primeras opciones y no alternativas ante una negociación caída. La lesión de Gonzalo Rehak, el arquero suplente, motivó una negociación de último momento para incorporar a Miltón Álvarez, de Morón, y completar el puesto. Y la chance de Ezequiel Cerutti, con pasado en San Lorenzo y presente en el Al-Hilal de Arabia, apareció como una oportunidad viable y difícil de desechar.

Los objetivos deportivos están claros. La Copa Argentina que inicia este viernes es un torneo que a Independiente le ha sido esquivo, ya que no pudo pasar de Cuartos de Final en ninguna de sus ediciones. Pero, claro, es una puerta directa a la Copa Libertadores del 2019, por lo cual tendrá preponderancia ante cada instancia definitoria. Sin ir más lejos, en su debut ante Central Ballester, de la Primera D, Holan pondrá a todos los titulares.

Luego estará la Copa Suruga Bank, el 8 de agosto en Osaka, ante el Cerezo. Y en el club nadie quiere dejar de lado la chance de sumar un nuevo título internacional. Ni siquiera aunque se trate de una copa en apariencia menor. "Hay que ganar todo y contar todo, porque los competidores hacen lo mismo", aseguró Holan en una entrevista con InfiernoRojo TV durante la pretemporada, en clara referencia a Boca Juniors. Es que si el Rojo se queda con el título que perdió en el 2010 por penales -ante el Jubilo Iwata- igualará la marca del Xeneize con 18 trofeos internacionales.

Copa Libertadores, Copa Argentina, Suruga Bank y Superliga. "Hay que ganar y contar todo porque los competidores hacen lo mismo", aseguró Holan.

La Copa Libertadores tendrá la misma importancia. Luego de la clasificación a los Octavos de Final, el Rojo deberá enfrentar al Santos. Y si bien ningún equipo brasileño es para menospreciar, todos entienden que es un rival al cual se puede vencer. La clasificación a Cuartos tendrá un condimento especial: el rival saldrá del vencedor de la llave entre River Plate y Racing. Y, aunque evitan mencionarla, la chance de un Clásico de Avellaneda -sería el único oficial en el 2018- seduce a más de uno.

Por último, aunque no por esto menos importante, el inicio de una nueva Superliga le supone al Rey de Copas un nuevo desafío. Desde aquel Apertura 2002 con Américo Gallego como entrenador que no consigue un título en el ámbito local. Ya es la racha más larga de la historia y eso inquieta a varios.

Los frentes están claros. Y tanto el cuerpo técnico como el plantel quieren demostrar que pueden subir la vara y estar a la altura.

Subir la apuesta, el objetivo del Independiente de Holan