Cambiar es la cuestión. El Gobierno presentará hoy -en el relanzamiento de su gestión ante gobernadores, empresarios y sindicalistas- un plan para cambiar la fórmula para ajustar los haberes jubilatorios, pensiones, y demás prestaciones sociales. La cita será a partir de las 12, en el Centro Cultural Kirchner (CCK), y estará presente el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti. El presidente Mauricio Macri, quién se pondrá el sayo de “reformismo permanente”, propondrá actualizarlos por inflación y de manera trimestral. Se descartan cambios en la edad de retiro.

Más allá de la presentación oficial del plan, todos estos temas serán debatidos en una comisión que propondrá una reforma previsional. La medida tiene su correlato con el fracaso de la modificación en la jubilación, que ocurrió hace unos meses. Ahora, con una nueva correlación de poder después de la victoria contundente del 22 de octubre, el oocialismo planea encontrar un Congreso que los acompañe. Desde el Gobierno pretenden cambiar la ley que se sancionó bajo el mandato de la ex presidenta Cristina Kirchner. La fórmula actual viene del 2009. Por aquél entonces el Congreso sancionó la llamada “ley de movilidad jubilatoria”, un proyecto que fue enviado por el Poder Ejecutivo Nacional y que determinó que las jubilaciones empezarán a actualizarse dos veces por año (en marzo y en septiembre). La norma establece que el incremento surge de una fórmula que combina las variaciones de los recursos que recibe la ANSES, los salarios de los trabajadores en blanco (privados y públicos) y los beneficiarios, entre otros puntos.

Reformas: gobernadores, empresarios, sindicalistas y hasta la Corte, invitados de lujo al festejo de Macri

La nueva fórmula tiene su primer escollo: los haberes están ligados a la desaceleración de la inflación. La derrota del modelo Sturzenegger, puede complicar los planes: el aumento de precios trepó en septiembre al 17,6% y supera la meta del 17% que fijó el Banco Central. Peligro: en este último tramo del año llegan un combo de aumentos de luz, gas, transporte, salud y peajes. Los aumentos continuarán a principios del 2018, tal como indica el Presupuesto elevado al Congreso. 

Rojo fiscal y recortes

El plan estima que las jubilaciones aumenten un 10% si la meta inflacionaria que desea el Gobierno logra corporizarse. Si todo sale tal como está planeado, no se cumplirá con el propio Presupuesto que elevó el oficialismo: en teoría, en concepto de jubilaciones y pensiones no contributivas se prevé un desembolso de $1.210.813, pero con este plan, los pagos serían de $1.092.142. Se recortarían $118.668 millones.  

Los planes de Cambiemos coinciden con las recomendaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI), la organización Económica para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE) y de varios economistas locales. Algunas recomendaciones de técnicos de la Anses prendieron las alarmas: señalaron que sería un error abandonar el cálculo actual y comenzar a calcularlo en base a la inflación.