Lo peor todavía no pasó, alertan los especialistas en torno a la situación económica del país. Un mes inesperado que debió atravesar el Gobierno con poca cintura para sortear los momentos más complejos: dólar y tarifas. El horizonte del 2019 se convirtió, por estos días, en la principal preocupación del Círculo Rojo.

En su columna en el diario La Nación, Sergio Berensztein planteó una pequeña radiografía del escenario de Cambiemos en medio de la tensión por el dólar: "Comenzó como una simple crisis cambiaria, contagió tanto al mercado de deuda como al de acciones y produjo una ola de desconfianza que aún amenaza con disparar una clásica corrida bancaria”.

Acto seguido, casi como un pedido contrareloj al Gobierno, expresó: "Llegó la hora de convocar en serio al consenso, dejar atrás el egoísmo y acordar una agenda estratégica que permita recuperar la confianza”.

Sin embargo, en sintonía con las otras plumas de La Nación y Clarín que siguen en la Casa Rosada, Berensztein coincidió en que recurrir al Fondo Monetario Internacional era la mejor alternativa posible. "Es la opción menos mala. Más allá del bombero elegido para apagar el incendio, la coyuntura que enfrenta el país es crítica: nuestro futuro como nación depende del resultado y de lo que hagamos como sociedad en estos tiempos otra vez aciagos”, advirtió.

"Hay una ola de desconfianza que aún amenaza con disparar una clásica corrida bancaria", advirtió Berensztein

El analista político, a su vez, alertó sobre los peligros de seguir haciendo "más de lo mismo”. Y todo con miras a los comicios del 2019 y las aspiraciones de Cambiemos de renovar su mandato. "Si la hipótesis fuera correcta, con un poco de dinero podríamos evitar una situación mucho más dramática. Aun en el escenario optimista, el Gobierno deberá pagar costos políticos todavía imprecisos”, lanzó.

¿La reelección asegurada? Nada de eso por estos días: "Con una excesiva cuota de ingenuidad, Cambiemos daba casi por descontada la reelección de Mauricio Macri. Una mueca del destino para los cultores de la posmodernidad”.

"Muchos operadores financieros, dentro y fuera de la Argentina, consideran que hace falta otra clase de respuesta: la crisis, vertiginosa y huracanada, es ahora de confianza y habría contagiado al propio gobierno y su credibilidad”, aseguró Berensztein. Credibilidad, confianza, crisis. Tres palabras que son tendencia en el Círculo Rojo por estos días.

¿La otra gran alerta del Círculo Rojo? El fuego amigo, las disidencias entre la propia alianza y el peligro de tener a un radicalismo en pie de guerra. "Sería injusto entonces interpretar esa caótica conferencia de prensa en la explanada de la Casa Rosada como una metáfora de la consistencia y la fortaleza del grupo gobernante”, analizó.

Cambiemos se enfrentará estos días contra sí mismo. Contra sus objetivos y deberá demostrar su fortaleza para salir de su peor momento. Esta vez, no tendrá en la otra vereda de la grieta a una Cristina silenciosa para confrontar.