Se reanuda la actividad judicial este jueves y febrero será un mes marcado por las definiciones judiciales que involucran a ex funcionarios kirchneristas, tal como lo fue 2017.

Cristina y su laberinto

La ex presidenta tiene dos expedientes que, según los cálculos judiciales, tendrán novedades que marcarán su 2018. El direccionamiento de la obra pública, causa en la que tiene un procesamiento firme junto a Julio de Vido, José López y Lázaro Báez, entre otros, y el expediente por el memorandúm con Irán serán elevadas a juicio.

Julián Ercolini ya tiene en su escritorio el pedido del fiscal Gerardo Pollicita donde pide el debate y los escritos de los defensores. En esta causa, Cristina pidió no sólo ir a juicio sino que sus abogados estén presentes en el sorteo en el cual se elija el Tribunal Oral Federal que le toque.

Bajo la lapicera de Claudio Bonadio está la decisión de enviarla a juicio por el memorándum con Irán. No es la primera causa en esa instancia que tiene la ex presidenta: el debate por dólar futuro se haría este año.

Doctrina Irurzun, a prueba

La Cámara Federal de Casación ya tiene en una de sus salas la causa de Bonadio. Ahí, deberá analizar la situación no sólo de los procesados en el caso sino de los detenidos y el argumentos para privarlos de su libertad.

La doctrina Irurzun se enfrentará por primera vez a una instancia de revisión. En un fallo que sacudió el mundo político, el presidente de la Cámara Federal votó para que se llevara adelante el desafuero y detención de Julio De Vido, basado en sus contactos "residuales” por haber sido funcionario.

Hasta ahora, los jueces que la habían aplicado eran los de la etapa de investigación y la intervención de la Cámara había sido de convalidar la situación, con la liberación de Amado Boudou como excepción. Los jueces de la Sala I de Casación Gustavo Hornos, Ana María Figueroa y Carlos Mahiques serán los encargados de evaluar, por ejemplo, la situación de Carlos Zannini, detenido desde diciembre y con cierta esperanza de salir de prisión en el corto plaza.

Todas las instancias, todos los personajes

Amado Boudou volverá a Comodoro Py en el marco del que estima un buen momento. Una vez que se reanude el juicio oral por Ciccone, el ex vicepresidente usará la declaración que Alejandro Vandebroele dio como "imputado arrepentido” en causas que lo involucran.

El supuesto testaferro declaró que no conocía a Amado, que sólo lo vio dos veces pero que no tuvo contacto directo y que el dinero para comprar la calcográfica salió de los bolsillos de Jorge Brito y Raúl Moneta. En el expediente renegociación de deuda con Formosa está involucrado también el gobernador de la provincia de Formosa Gildo Insfrán. En la causa por enriquecimiento ilícito falta aún la indagatoria de la ex novia de Boudou, Agustina Kämpfer, prevista para el 7 de febrero.

Mientras espera definiciones sobre Gas Natural Licuado (la Cámara Federal tiene en estudio su procesamiento); Julio De Vido se prepara para afrontar el juicio por la Tragedia de Once donde se intenta establecer la responsabilidad que tuvo en el hecho ocurrido en febrero de 2012.

Tal como contó elCanciller, Cristóbal López y Fabián De Souza esperan el 8 de febrero para conocer la decisión de la Cámara Federal. En juego está la libertad y las condiciones del procesamiento dictado por Julián Ercolini. Otro que espera la palabra de la Cámara es Diego Lagomarsino, procesado por el homicidio simple del fiscal Alberto Nisman.