Tras una semana tormentosa por las turbulencias financieras, María Eugenia Vidal visitó el programa de Diego Leuco para defender el gradualismo, desmitificar la mesa chica del Gobierno y relatar el drama de 2015, cuando casi "se repite el desastre del 2001". 

"Cuando uno se quema con leche, ve la vaca y llora. Y cuando uno ve que el dólar sube, se asusta".

"Aún con sus dificultades el gradualismo sigue siendo el mejor camino posible".

"En 2015 estuvimos cerca de repetir el desastre de 2001: si seguía el modelo kirchnerista, ibamos hacia una hiperinflación. Y si aplicábamos el ajuste de shock, terminábamos como en 2001".

"El ajuste brutal implicaba aumentos de 2000% en las tarifas de gas y luz, reducción de las jubilaciones y restricción de los programas sociales".

"La velocidad del ajuste la va marcando aquel que nos presta el dinero y ahora nos dicen que tenemos que ir "un poco más rápido"".

"No podemos pedirle a la gente que haga más esfuerzos, si nosotros no damos el ejemplo".

"Ningún argentino quiere volver a ese país que tiene la cotización del dólar todo el día en la pantalla de la tele".

"Hoy tuvimos un gran día los bonaerenses porque bajó la mortalidad infantil: hay 229 bebes y 20 madres que no se murieron".

"La mesa chica está sobrevalorada. Carrió es una de las dirigentes con mayor peso en la toma de decisiones y nunca figura en la mesa chica".

"Mis preocupaciones siempre están con el bolsillo de la gente, la seguridad, las obras y con estar cerca de quien lo necesita".