En el 2015 fue considerado el artista español más escuchado en Spotify y es uno de los tres más escuchados en la primera década de la plataforma en España. Además, Ramón Melendi Espina, conocido como Melendi, está por alcanzar los 20 años de trayectoria como cantante y es un artista internacional multipremiado con millones de seguidores en sus redes sociales. 

Puso su voz y su música para la tercera y última entrega de la saga Cómo Entrenar a tu Dragón que se estrena el 31 de enero en Argentina y conversó con El Canciller sobre su costado más futbolero, su relación con el público y contó cuál es su conexión con la película dirigida por Dean DeBlois. Además, reveló por qué no le convence la idea de ser popular en el mercado nacional.

Rompamos el hielo. Sé que te gusta el fútbol y de tu pasado como jugador profesional. ¿Qué sentiste respecto al superclásico Boca-River en tu país?

Como futbolero que soy, a mí me parece que las finales se tienen que celebrar donde se tienen que celebrar. En este caso, tendría que haber sido en el campo de River Plate. Pero bueno, la verdad que el comportamiento de tus compatriotas aquí fue ejemplar eh, y el partido que se celebró, para nosotros fue maravilloso. Yo no había tenido la oportunidad de ver un superclásico y fue muy nutritivo. Vi dos equipos que se entregaban a tope en el campo. Como amante del fútbol, fue bonito.

¿En algún momento te agarra nostalgia y pensás “Pucha, qué hubiese pasado si continuaba jugando al fútbol”?

Me hice ideas durante un tiempo, ahora ya han pasado tantos años -dejó el fútbol en el 2001 para dedicarse a la música- que además no es como andar en bicicleta, todo se olvida. Sobre todo cuando vas cumpliendo años, y echas pachangas, o sea, en medio de partiditos con los amigos ves que las piernas no responden, tienes que dar tres toques para controlar una pelota…y empiezas a plantearte que a lo mejor has escogido de la mejor manera. Y además, el “y si…” nunca arroja buenos resultados. ¿Eres futbolero?

Sí, y de Boca Juniors. ¿Y vos?

Mi mujer es de Rosario, por lo tanto soy canalla. Pero en España mi club es el Real Oviedo, donde formé parte del plantel profesional.

¿Por qué aceptaste componer e interpretar la canción original de Cómo Entrenar a tu Dragón 3

Son oportunidades que se dan. En un momento dado la gente de DreamWorks pensó en mí para hacer la canción para América Latina y España, y la verdad que a mí me ha hecho especial porque tengo cuatro hijos. He visto bastantes películas infantiles y es una de las que más me ha gustado. En la primera entrega, hay una escena especial que es tan emocionante que se me han caído algunas lagrimitas y ahí empecé a seguir la saga. A mis hijos les encanta y para mi el hecho de que ellos vayan al cine y escuchen una canción del papá es un añadido, hay algo emocionante ahí. Me pareció una idea fantástica, tiré para adelante y salió esta canción que está gustando mucho.

¿Qué te pidieron desde DreamWorks a la hora de componer la canción? Pensando que es la última entrega de la saga… 

En realidad no me pidieron nada. Creo que Cómo entrenar… es una de esas historias que te marcan a fuego. Como todas las películas infantiles buenas, te dejan una moraleja, un aprendizaje. Traté de enfocarme en una canción que hablara del cielo y que incluya valores. Empezamos hablando de dragones y en los valores que nosotros creemos, que no siempre tenemos razón como adultos, y que sí pueden tener los niños.

A tus hijos les gusta la saga y calculo que tuviste que ver la película para tener una idea sobre la composición de la canción original. ¿Te preguntaron tus hijos cómo finaliza la película?

No la vi. Vi las dos primeras películas y me dijeron un poquito cómo iba el argumento de la tercera. No me centré demasiado en el argumento para hacer la canción, van por dos caminos diferentes. Traté de hacer algo emocionante, que fuera muy enfocado para la gente más joven. Lo que sí tuve que ver son fragmentos de Grimmel, uno de los malos, ya que aporto mi voz para la versión española. Pero realmente cuando doblas tampoco la ves porque no te dan la película tal cual. No sé si tú los has visto alguna vez los fragmentos de doblaje, pero incluyen códigos, barras, números, etc. Es una cosa bastante rara, bastante complicada. Realmente no la vi.

Eso me da pie a la siguiente pregunta. Esto de ponerle voces a personajes animados, con esta primera experiencia sumado a tu carrera en videoclips. ¿Te gustaría en algún momento intentar con la actuación? 

No creo que tenga mimbres. No tengo especial pasión, no es que me apasione. A mi me gusta mucho cuando salgo a un escenario; disfruto cuando compongo. Cuando hago un video, no disfruto demasiado. Estoy casi siempre muy tenso. Yo creo que cada uno tiene que dedicarse a lo que sabe hacer y lo demás, pues que lo hagan los profesionales. 

Melendi: "No siempre tenemos razón como adultos, y sí pueden tenerla los niños"

Hay algo que no puedo dejar de preguntarte sobre tu carrera, como músico, sos el artista español más escuchado de 2015 en Spotify. Tantos años, tantos discos de platino, tantos premios, ¿importa o no importa? 

Hombre, claro que importa. Estar en los puestos altos en una plataforma digital quiere decir que estás en los puestos altos de la música. Empecé hace 20 años y no había ninguna de estas plataformas. Yo creo que eso te contesta a la pregunta de si lo estamos haciendo bien. 

¿Y la adaptación a estas plataformas? En algún punto, todos los artistas de más de 10 años de carrera tuvieron que modificar algo para impactar diferente en las plataformas. ¿Eso como artista a vos te modificó? ¿Te costó o fue un proceso natural?

Me gusta mucho la pregunta porque es tan aplicable a la vida, no solo a la música, a la vida, a la política, a todo. A los seres humanos nos cuesta mucho aceptar el cambio y no nos damos cuenta que resistirnos es un sinónimo de sufrir. Si estamos aquí es para reflexionar y para ir a favor de corriente en cierto punto, y darnos cuenta de que no controlamos nada, que lo único que podemos decidir es ser felices. “Tener razón o ser feliz o ser feliz” decía mi padre. 

Tu pareja es rosarina, venís seguido a la Argentina, pero aquí no has explotado como artista. ¿Tenés ganas, te tienta? 

La verdad es que voy 3 o 4 veces al año, pero por familia. Como músico, la verdad es que últimamente voy poco. No hace falta que lo diga, de hecho tengo dos hijas argentinas, pero no sé, las cosas no se dan. Estamos trabajando mucho en otros territorios cercanos. También estoy muy cómodo cuando voy a su país, disfruto de una manera que no puedo disfrutar otras partes del mundo. Ojalá algún día se dé y podamos tener lazos más estrechos a nivel comercial porque ha decir verdad sí es una espina que tengo.