El fiscal Carlos Stornelli pidió a la Justicia el procesamiento del ex secretario de Comercio Guillermo Moreno por falsificar los datos inflacionarios, colocar un programa informático que ponía topes a los registros de precios para que el sistema no los advirtiera, abusar de sus deberes y violar el secreto estadístico. Si bien la caída de Moreno sería exhibida como otro "trofeo" oficialista, la causa podría provocar una ola de demandas de los tenedores de bonos y complicar las cuentas nacionales ya asfixiadas.

Arma de doble filo


Lo que parecería ser otra victoria para el Gobierno -una eventual condena para Moreno-, que sumaría otro caído a la lista de los kirchneristas que deambulan por Ezeiza y Marcos Paz, podría traer un coletazo sumamente perjudicial. Los bonos que emitía el país durante el kirchnerismo estaban atados al cociente inflacionario, por lo que, de probarse la manipulación del índice, una ola de bonistas tendría las puertas abiertas para iniciar demandas contra el Estado.

Los propietarios de bonos atados a la inflación se vieron afectados por cifras millonarias debido al Índice de Precios al Consumidor oficial que transmitía el Indec. Se estipula que la rentabilidad de los bonos bajó hasta un 50 por ciento debido a esta manipilación de datos.

Por ejemplo, el Gobierno kirchnerista emitio 19.500 millones de dólares en bonos ajustados por el CER. De ese monto, el 70 por ciento de los bonos está sujeto a la inflación de Moreno. De esta manera, un fallo de la Justicia en contra del Gobierno provocará una demanda millonaria al Gobierno Nacional, que ya ha demostrado con el lema de la "transparencia" y la "normalización" que no tendrá otra opción que pagar. La necesidad de bajar el gasto público y reducir el déficit fiscal chocan con el eventual festejo de ver a otro de protagonista de la gestión kirchnerista en Ezeiza o Marcos Paz.

Hace un poco más de dos meses, la Justicia, en manos del Juez Federal Canicoba Corral, había fallado a favor del ex secretario de Comercio por "falta de mérito" para procesarlo. En Clarín, Marcelo Bonelli había adelantado que Gustavo Lopetegui y Mario Quintana habían hecho "lobby" en los pasillos de la Justicia, transmitiendo el deseo de la Casa Rosada de salvar a Moreno para no complicar más las cuentas fiscales.

Moreno en Comodoro Py


La situación judicial de Moreno se complica aún más. La semana pasada el ex secretario fue condenado a dos años y medio de prisión por usar dinero público para imprimir cotillón con el lema de "Clarín miente". Sin embargo, esa condena no está firme y Moreno apelará el fallo. Además, por ser una pena inferior a tres años, es excarcelable, aunque sí complicaría al ex funconario de sumarse una nueva pena en su contra.