El único detenido por el crimen del colectivero Daniel Barrientos declaró hoy ante el fiscal Gastón Duplaá, aseguró que es inocente y por ahora seguirá detenido.   

En indagatoria, el acusado, un joven de 19 años, dio su versión de los hechos y negó la participación en el crimen a la par que dijo no conocer a los autores.   

Por otro lado, brindó la clave de su teléfono celular que está secuestrado en poder de la fiscalía y aseguró que a la hora en que ocurrió el crimen, se encontraba en su casa, algo que puede probar mediante la imagen de una cámara de seguridad en el lugar.   

Por ahora, el joven de 19 años seguirá detenido y a la espera que el fiscal, con los elementos de prueba que se estaban recabando, determine si tuvo o no vinculación. Mientras tanto, se busca a otras dos personas que se supone participaron del crimen ocurrido el lunes por la madrugada.   

La prueba que hasta el momento incrimina al único detenido es un reconocimiento positivo que ha brindado uno de los testigos que era pasajero del colectivo que conducía Barrientos, el cual fue asaltado por delincuentes.   

Adriana, madre del detenido, aseguró que su hijo es inocente.

"Mi hijo salió a las 7 de la mañana a trabajar. Es más fácil agarrar a cualquiera, llevárselo y ya está", aseguró en diálogo con Todo Noticias (TN).   

"Mi hijo estuvo en mi casa, tengo la filmación del jardín de enfrente, de cuando entra y cuando sale con el auto a trabajar", aclaró.   

Melisa, una cuñada del joven, contó que tiene una agencia de remises que puso con un hermano y consideró que simplemente lo detuvieron porque "algún pelotudo tenían que agarrar".   

"El pibe se levanta a las 6 a laburar y vuelve a la casa a las 12 de la noche. Tiene una agencia de remises que se pusieron con el otro hermano. El auto que está secuestrado es de mi pareja que se lo vendió en cuotas para que él pueda tener su capital. Se lo terminó de pagar hace un mes y tiene turno ahora para hacerle la transferencia. No es nada de lo que dicen", alegó en declaraciones radiales.