A través del Boletín Oficial, el Gobierno nacional oficializó la suba a los jubilados y a los beneficiarios de asignaciones familiares y universales a partir de diciembre en el orden del 8,7%.

De este modo, en lo que va del año, los jubilados  habrán tenido un incremento del 51,1% frente a una inflación anual, estimada por consultoras privadas, en 56% aproximadamente. Así se repetiría lo ocurrido en 2018, cuando las jubilaciones subieron 28,5% en total y la inflación estuvo por encima del 40%.

Con estos números, la jubilación mínima pasará de $12.037,22 a $14.067,93. De acuerdo al cronograma (y siempre teniendo en cuenta que no haya cambios en las condiciones de actualización de los ingresos con la llegada de un nuevo gobierno) el próximo aumento para los jubilados está pautado para marzo de 2020 y será de 11,6%.

Hasta el momento, se desconoce si el Gobierno que asumirá el 10 de diciembre, encabezado por Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner,  mantendrá esa fórmula o impulsará modificaciones.

La fórmula de movilidad (un mix entre el índice de precios medido por el Indec y el Ripte) también alcanza a los beneficiarios de la Asignación Universal por Hijos (AUH). En este caso, habían tenido un aumento anual en marzo del 46%. Sin embargo, como quedó por debajo de la movilidad finalmente acumulada (del 51,1%), habrá un reajuste.

[recomendado postid=94598]

Así, el primer tramo de la AUH se incrementará de $2.525 a $2.746. La asignación por hijo con discapacidad subirá a $8947, mientras que la asignación por embarazo también será de $2746.

También se ajustan con este índice las pensiones no contributivas como la PUAM, que equivale al 80% del haber mínimo, y el cobro por hijo de los trabajadores formales, asalariados o monotributistas.