Un terremoto de magnitud 4,4 causó estupor, pánico y algunos daños materiales este jueves en la región italiana de Campos Flégreos, cerca de Nápoles. Según el reporte de medios locales, no se registraron heridos de gravedad como consecuencia del temblor.

El sismo principal se produjo a las 1:25 hora local -las 22:25 de Argentina- a 2,5 kilómetros de profundidad, de acuerdo con los indicado por el Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología (INGV). Y fue seguido por una serie de réplicas de menor intensidad.

Imágenes publicadas por los pobladores de la zona en redes sociales mostraron vehículos cubiertos de piedras y escombros, casas con fisuras, techos caídos y habitantes que circulaban aterrorizados por la calle en plena madrugada.

Un habitante muestra cómo quedaron las veredas y autos, repletos de escombros producto del sismo (Video: redes vía NA).

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Una mujer sufrió heridas leves, indicó la agencia noticiosa Ansa, mientras que la primera ministra Giorgia Meloni anunció que estaba atenta a la evolución de la situación y en contacto con los servicios de protección civil.

La zona volcánica de Campos Flégreos ha sufrido varios movimientos telúricos en los últimos años, incluido otro de magnitud 4,4 en mayo de 2024. Hasta el momento, ese era el más fuerte en los últimos 40 años.

El actual terremoto tuvo su epicentro en Bagnoli y Pozzuoli, pero se advirtió en muchas localidades de la provincia de la Campania. En Pozzuoli, los bomberos intervinieron después de que se derrumbara el techo de una casa y rescataron a una persona con lesiones menores. 

En tanto, en Bagnoli, parte de la mampostería de varias edificaciones cayó sobre las veredas y también sobre coches estacionados, mientras que algunas personas quedaron atrapadas en una vivienda después de que las puertas de entrada no se abrieran debido al sismo. Quienes estaban en los pisos inferiores lograron salir por las ventanas y los rescatistas asistieron a los demás habitantes.

"Son horas de mucha actividad. Estamos controlando todo el territorio, pero por ahora no se observan problemas graves", declaró el alcalde de Pozzuoli, Luigi Manzoni, al canal Rainews. Asimismo, expresó que "el temblor fue muy fuerte" e "inmediatamente" se pusieron en marcha "todas las actividades" y el acondicionamiento de "las áreas de espera" y alojamiento para quienes "no quieren quedarse en casa".