Luego de la multitudinaria misa de luto por el papa Francisco en la Plaza de San Pedro y en medio de sus Congregaciones Generales de cara al Cónclave en el que elegirán al nuevo líder de la Iglesia católica, más de 100 cardenales se dirigieron este domingo a la Basílica de Santa María la Mayor, en donde el último sábado fueron sepultados los restos del Sumo Pontífice, con el objetivo de rendirle homenaje y orar ante su tumba.

Los purpurados -cuyo encuentro para designar al sucesor del argentino comenzaría entre el 5 y el 6 de mayo- realizaron su procesión a ese templo por la tarde de Roma. Una vez allí, de a uno o en grupos de tres, se detuvieron ante el sepulcro para rezar por el Santo Padre.

De acuerdo a Vatican News, "algunos permanecieron unos minutos en oración, recitando un Ave María, otros se persignaron o se hicieron una foto, los que pudieron se arrodillaron unos instantes", y luego se reunieron todos en la Capilla Paulina, junto a la tumba.

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Durante su visita, que tuvo lugar en el marco de la Fiesta de la Divina Misericordia, los prelados rezaron las Segundas Vísperas, que estuvieron presididas por el Cardenal Arcipreste Coadjutor, Rolanda Makrickas, y a las que se unieron grupos de fieles.

Al respecto, el medio oficial de la Santa Sede señaló que "más de 20.000" personas hacían fila desde la mañana de este domingo "para 'saludar' al Pontífice, rezar ante su lápida y entregarle ofrendas florales".

En tanto, con vistas al Cónclave en la Capilla Sixtina para votar al nuevo Papa, los 133 purpurados electores -provenientes de 71 países- realizan deliberaciones previas para conocerse mejor. Además, los posibles candidatos a la sucesión deben presentar sus propuestas.

La reunión de este lunes abordará la participación del cardenal Angelo Becciu, uno de los colaboradores más cercanos al Papa hasta que, en 2020, Francisco le quitó sus "derechos asociados al cardenalato" después de que quedara envuelto en un escándalo por la compra de un edificio en el centro de Londres.

El italiano de 76 años, que siempre se proclamó inocente, fue condenado formalmente en 2023 a cinco años y seis meses de cárcel por delitos financieros. Según medios romanos, el nacido en Cerdeña se presentó hace unos días en las asambleas previas al cónclave y reclamó participar de la votación.

La conformación del Cónclave presenta un panorama complejo, con una aparente mayoría progresista, ya que 108 de los 133 cardenales fueron elegidos por Jorge Mario Bergoglio. En este sentido, aunque ese grupo podría alcanzar los dos tercios necesarios para la elección, los conservadores y grupos minoritarios tienen la capacidad de bloquear el resultado.

Hasta la designación del nuevo Papa, la Santa Sede quedará en manos del camarlengo, actualmente el estadounidense Kevin Farrell, quien debe sortear el inconveniente de que que el número de electores es superior al que figura en la normativa vaticana, que fija un máximo de 120.