El mega concierto brindado en Río de Janeiro por la cantante Lady Gaga en la noche del sábado tuvo un inesperado trasfondo que se reveló en las últimas horas. Las autoridades brasileñas informaron este domingo sobre un intento de atentado que frustró la policía en la previa del recital del que participaron más de 2 millones de personas, además de dos detenciones.

"La policía civil, en conjunto con el Ministerio de Justicia, impidió un ataque con bomba, en Copacabana", difundieron mediante un comunicado en las redes sociales, en donde ampliaron que se arrestaron a dos responsables que planeaban intervenir el show con "explosivos improvisados".

Respecto a los aprehendidos, uno de ellos sería el presunto líder del grupo, quien tiene en su contra cargos de posesión ilegal de armas en el estado sureño de Rio Grande do Sul. El otro es un adolescente, investigado por la justicia por casos de pornografía infantil en Río de Janeiro.

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En la misma publicación, consignaron que los involucrados "reclutaban participantes para promover ataques con uso de explosivos y cócteles molotov", constataron en medios locales.

La planificación se habría titulado "Operación Fake Monster", de acuerdo a lo que trascendió en redes sociales, en alusión a la referencia de "Little Monsters" ("Pequeños Monstruos"), como denomina la artista a sus seguidores.

El concierto de Lady Gaga tuvo un récord de asistencia. Hubo alrededor de 2,1 millones de espectadores conglomerados en Copacabana, por lo que las autoridades debieron desplegar un operativo de seguridad, con más de 5.000 agentes por las calles, drones y cámaras con reconocimiento facial.

Desde el ministerio celebraron el haber frustrado "el complot para detonar explosivos" durante el concierto de la artista estadounidense, quien regresó a los escenarios de Brasil luego de 13 años de ausencia.