Pese a las declaraciones del presidente Alberto Fernández acerca de que los partidos de fútbol podrían continuar disputándose en el país sin público (incluso solicitó a las empresas dueñas de los derechos de televisión que liberaran el contenido), el deporte más popular se detendrá hasta el 31 de marzo, en el marco de las medidas para mitigar el contagio de coronavirus.

Si bien la AFA había postergado las competencias a nivel infantil y juvenil por el mismo motivo, la reserva y las primeras divisiones masculinas y femeninas, debían continuar disputando sus partidos, solo que sin público.

Sin embargo, los jugadores tenían decidido no jugar, y por eso habían pautado una reunión en la sede de Futbolistas Argentinos Agremiados para el próximo miércoles. Teniendo en cuenta la situación, se tomó la medida de suspender la actividad por las próximas dos semanas, disposición que se hará oficial en el día de mañana.

Hasta hace pocas horas, Argentina era el único país de Sudamérica que todavía no había decretado la suspensión del fútbol ante los riesgos de contagio de coronavirus. El pasado fin de semana, se disputó la primera fecha de la Copa de la Superliga, y River optó por no presentarse a su encuentro frente Atlético Tucumán.

Tras el anuncio del club millonario ocurrido en la noche del viernes, Superliga había emitido un comunicado precisando que las autoridades del gobierno nacional indicaron que los partidos podían jugarse sin público, y aseguraron también que los jugadores no formaban parte de los grupos de riesgo, por lo que podían desarrollar su trabajo normalmente. En este contexto, River fue el único equipo que no se presentó, y todos los demás encuentros de la fecha se disputaron con normalidad.