Mientras el Gobierno nacional estudia por estas horas hasta cuándo extender la cuarentena obligatoria para aplanar la curva de infectados por el coronavirus, la Ciudad de Buenos Aires continúa trabajando en medidas de prevención para atacar la problemática en el distrito más poblado del país.

Si bien la prolongación (o no) del aislamiento social preventivo es una potestad de la Nación, fuentes del Ministerio de Salud porteño indicaron a El Canciller que la medida se debería estirar, como mínimo, al jueves 9 de abril.

La ecuación es simple: para obtener conclusiones precisas del funcionamiento de la cuarentena, es necesario que pasen 20 días del inicio de la misma (19 de marzo). Dado que esa fecha coincide con los feriados de Semana Santa, lo lógico sería que el confinamiento continúe hasta el domingo 12 de abril.

El gobierno de la Ciudad espera el pico de contagios para el domingo 26 de abril. Para ese entonces, se asegurará tener 170 respiradores que, según lo previsto, permitirán solventar al sistema sanitario porteño sin inconvenientes.

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Otra disposición que lanzará la administración de Horacio Rodríguez Larreta en los próximos días será la implementación de consultorios ambulatorios en forma de containers. Los ubicarán en las puertas de los hospitales, para hacer tests antes de que las personas ingresen a los sanatorios.

Este viernes, los profesionales de la salud comenzaron a efectuar los análisis a los más de 1.600 repatriados que fueron llegando a la Ciudad en los últimos días y se confinaron en distintos hoteles. En el primer día, realizaron 56 tests. Este sábado, realizarán 500 exámenes más y esperan alcanzar la totalidad de evaluaciones el próximo lunes.