La Asamblea General de la ONU cuenta con una participación récord de 170 presidente que intervienen en forma remota con videos de 15 minutos.

En la primera jornada, los mandatarios de Estados Unidos, China, Brasil y Rusia no perdieron oportunidad para lanzar algunos dardos como la disputa geopolítica. Qué dijeron.

Trump, de punta contra China

Debemos responsabilizar al país que desató esta plaga al mundo, China”, disparó Trump durante su intervención.

El jefe de Estado norteamericano insistiró: “El gobierno chino y la OMS, que está virtualmente controlada por China, falsamente declararon que no había evidencias de transmisión entre humanos. luego dijeron falsamente que los asintomáticos no esparcían la enfermedad”.

Para concluir, el republicano señaló: "Venceremos a la pandemia y entraremos a una nueva era sin precedentes de prosperidad y paz".

La respuesta china

A su turno, Xi Jinping le respondió a Trump: "No tengo intención de pelear ni una guerra fría ni una caliente con ningún país".

"No debería estar permitido que se haga lo que uno quiera y actuar como el jefe del mundo. Nadie debe estar sometido por aquellos que levantan su puño. No debe haber prácticas de excepcionalismo o doble estándares. Tampoco debe distorsionarse la política internacional o usarla de pretexto para deslegitimar los derechos e intereses de otros países", advirtió el líder chino.

Putin y la vacuna

"Estamos dispuestos a compartir nuestra experiencia y a continuar interactuando con todos los Estados y estructuras internacionales, incluido el aprovisionamiento de la vacuna rusa para otros países, la cual ha probado su fiabilidad, su seguridad y su eficacia", dijo Putin.

"Rusia está convencida de que a partir de ahora es necesario utilizar todas las capacidades de la industria farmacéutica mundial para garantizar un acceso gratuito a la vacunación de los ciudadanos de todos los Estados a corto plazo", agregó.

Bolsonaro y el negacionismo

El presidente de Brasil, a su turno, no pudo evitar incurrir en sus acusaciones por la pandemia: "Como ocurrió en todo el mundo la prensa brasilera también politizó el virus, diseminando el pánico entre la poblacion".

"El lema ´quedense en casa, que la economía y la gente viene después´casi ocasionó un caos social en el país", remarcó.

"Implementamos varias medidas económicas que evitaron un mal mayor. Aplicamos de manera imparcial un programa que llevó casi mil dólares a 65 millones de personas. Nuestro programa de asistencia a los más pobres fue tal vez uno de los mayores del mundo. Asistimos a más de 200 mil familias indígenas con productos alimenticios y prevención de la covid-19", concluyó.