El 15 de julio de 2010, Argentina se convirtió en el primer país de Latinoamérica en convertir en ley el matrimonio igualitario, y reconocer así los derechos de las poblaciones sexualmente diversas. Nueve años después, más de 18 mil parejas homosexuales ya se casaron en el país.

La ley 26.618 fue el resultado de más de treinta años de lucha del movimiento LGBTI. A nivel regional, Argentina dio el primer paso y se convirtió en pionero en materia de igualdad: le siguieron Brasil y Uruguay que sancionaron la ley en 2013; Colombia, en 2016 y Ecuador, en 2019. 

La sesión en el Senado duró unas 15 horas, donde se vivió un debate caliente con voces tanto a favor como en contra. Afuera, una multitud siguió el minuto a minuto del debate y la votación. Finalmente, lo convirtió en ley con 33 votos a favor, 27 en contra y 3 abstenciones.