El aislamiento social como respuesta a la pandemia por el coronavirus afectó a todos los sectores de la economía. El turismo fue uno de los más perjudicados. Si bien existió un paréntesis en el verano 2021, las familias no habían podido disfrutar al 100% sus vacaciones por la inminencia de la segunda ola y una meseta de casos estable pero persistente. Este último fin de semana XL de cuatro días permitió a muchos escapar de sus rutinas laborales y académicas en medio de un relajamiento notorio en los protocolos contra el SARS-CoV-2, con números de contagios y fallecidos por debajo de los mínimos históricos.

“Este fin de semana largo ha sido el mejor de los últimos diez años”, informó el ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens. Los números lo acompañan: más de 4.273.500 de personas viajaron alrededor del país durante estos cuatro días, lo cual implicó un 55% más de movimiento respecto al mismo feriado de 2019, de prepandemia. En total, gastaron casi $18 mil millones, es decir, un 334,5% más que en ese periodo.

Según un informe de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME), el gasto diario de los turistas fue de $2.700 per cápita y la estadía mínima, de 3,3 días. Asimismo, el 41% de ellos se hospedó en hoteles, el 33% en inmuebles propios y el 17% alquiló un departamento, casa o cabaña. Además, el 61,6% lo hizo a través de reservas previas. "Nunca un octubre se había visto tanta gente viajando”, comunicó la cámara empresaria.

Los lugares más visitados

Pinamar y San Pedro, en la provincia de Buenos Aires; Villa General Belgrano, en Córdoba; Calingasta y Pocito, en San Juan; Esquel, en Chubut; Puerto Iguazú en Misiones; y Bariloche, en Río Negro, fueron las ocho ciudades que informaron el 100% de su ocupación en hospedajes. El ministro Lammens informó que en las provincias de Mendoza, Entre Ríos, Córdoba, Salta, San Luis, Chubut, Catamarca, Jujuy y Corrientes se llegó a la “ocupación plena”. Otras urbes como Mar del Plata o incluso Ushuaia y El Calafate también llegaron a cifras cercanas al 90%.

En territorio bonaerense, la costa explotó en términos turísticos. Miles de personas colapsaron, con sus autos cargados, las rutas que se dirigían a puntos con altísimos niveles de ocupación, como Cariló (95%), San Clemente del Tuyú (87%) o Necochea (86%). Fueron más de 141 mil turistas los que descansaron en el Partido de la Costa, un 65% más que en el mismo fin de semana de 2019.

La Ciudad de Buenos Aires también rompió récords. Su ocupación hotelera fue del 51%, el porcentaje más alto desde el 8 de diciembre de 2020, cuando el Gobierno habilitó el turismo nacional por primera vez desde la llegada del virus al país.

Verano 2022

Se esperaban índices positivos para este fin de semana XL, pero los datos superaron las expectativas que se tenían. Por eso, los números recabados presentan un panorama alentador para lo que podría llegar a la ser el próximo verano si la situación epidemiológica se mantiene en los pisos mínimos o incluso mejora.

“Nos permite ilusionarnos con una temporada de verano histórica”, expresó Lammens. El programa PreViaje tiene mucho que ver con ello. El verano pasado, la política pública que devuelve el 50% de lo gastado en carácter de crédito –utilizable en futuros consumos turísticos– fue exitosa y también dejó abierta la posibilidad para que muchos de los que viajaron a principio de año lo hagan también a comienzos de 2022 aprovechando ese dinero alojado en su cuenta. "El turismo ya está en marcha y será un motor de la reactivación", celebró el presidente Alberto Fernández en Twitter.