Carrefour Argentina está viviendo una situación angustiante para muchos de sus empleados que no saben si podrán mantener su empleo en los próximos meses. Sin embargo, la propia empresa sigue comunicando sus "descuentos alucinantes" como si nada estuviera pasando.

El directorio de la compañía presentó el jueves un proceso preventivo de crisis ante el Ministerio de Trabajo, que anticipa despidos masivos de al menos tres mil empleados y el posterior cierre de varias sucursales. La situación actual es el desenlace de tres años de balances negativos y pérdida de mercado, que también concluyó con el despido de la cúpula local.

En enero, el CEO argentino Daniel Fernández fue reemplazado por el francés Rami Baitieh, un corporativo que realizó su carrera en varias sedes de Carrefour alrededor del mundo. La caída del 3,7% en las ventas minoristas en enero fue el límite y se gestionó el cambio de directivos.

En sus redes sociales, Carrefour parece no haber vivido el cimbronazo que disminuirá gran parte de sus sucursales. Hoy en día, Carrefour es uno de los mayores empleadores privados de Argentina: manejan 20 mil trabajadores y 500 sucursales a lo largo del país. Sin embargo, el problema habría sido con el comercio minorista, afectado por la inflación y la caída de ingresos.