Leonela Ayala, tía de Sheila, y su pareja, Fabián González, quedaron demorados en calidad de "aprehendidos" por el crimen de la nena de 10 años en San Miguel. Según fuentes policiales, se habrían quebrado ante los investigadores: "Tomamos alcohol y drogas y no sabemos qué pasó".

El caso provocó una fuerte conmoción en todo el país, desde que comenzó la búsqueda de la nena hasta que finalmente fue hallada sin vida. Ahora, todas las miradas apuntan a sus tíos, acusados por el asesinato de la niña.

La tía no estaba ajena y elegía la exposición en los medios. Incluso, 24 horas antes de su arresto, otra era la situación. La tía, embarazada, había salido en reiteradas ocasiones para pedir por la aparición con vida de su sobrina y ahijada.

A sangre fría: escalofriante testimonio de la tía de Sheila 24 horas antes de confesar el crimen

"De parte de nosotros no tenemos ajuste con nadie, no tenemos ningún problema con la Justicia. Ni yo ni mi hermano. Aparte mi hermano no va a secuestrar a su hija", dijo el miércoles en una charla con Telefe, desligándose del caso sin que el periodista se lo preguntara.

¿Cuál era la estrategia de la tía de Sheila? Apuntar contra Yanina, madre de la nena. "Sabemos que ella andaba en algo raro, hacía entrar drogas en la Comisaría... Una vuelta le dijo a mi hermano que les traía a los chicos porque ella tenía un ajuste de cuentas con la mafia”, dijo.

Según se pudo saber en la investigación, Leonela Ayala y su pareja viven en el departamento que, para los investigadores, pudo haber sido el lugar de cautiverio y asesinato de la nena.