El juez Claudio Bonadio volvió a darle hoy una buena noticia al Gobierno, al citar a indagatoria a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner y a otros 100 empresarios y exfuncionarios por la presunta cartelización de la obra pública, una investigación derivada de la causa de los cuadernos. 

El juez arrastró, así, a la expresidenta de nuevo al terreno judicial, que se espera que sea uno de los ejes de la campaña electoral. En los últimos días, las encuestas de opinión pública mostraban a la senadora en ascenso, tanto en imagen como en intención de voto. Hoy el juez volvió a enfrentarla con una causa que, por ahora, beneficia a Cambiemos.

El magistrado ordenó 101 declaraciones indagatorias en el marco de una causa por presunta cartelización de la obra pública, derivada de la investigación surgida a partir de los cuadernos del exchofer Oscar Centeno. Además de la exmandataria, deberán pasar por Comodoro Py, a partir del 20 de febrero, exfuncionarios y empresarios como Aldo Roggio, Juan Chediack y Ángelo Calcaterra, el primo del presidente Mauricio Macri.

Por ahora, la líder de Unidad Ciudadana guarda silencio. La única intervención pública que tuvo en lo que va del mes fue el pedido que hizo ayer para postergar el juicio oral por las obras viales, algo a lo que el fiscal se opuso. La anterior había sido el 26 de enero, cuando compartió en sus redes un video del encuentro del PJ en Santa Teresita, en el que se recodaba a Néstor Kirchner. 

La estrategia de la expresidenta es esperar a que el resto de los espacios políticos comience a definir de qué forma irá a las elecciones presidenciales de este año. Así ocurrió, por ejemplo, con la unificación de las elecciones de la Provincia y la Ciudad de Buenos Aires con las nacionales, o con la definición del tucumano Juan Manzur sobre su participación en Alternativa Federal.