Jorge Lanata volvió a la televisión para anunciar que se irá. En la primera emisión de su nuevo ciclo "Hora 25", por TNconfesó que 2019 será su último año en los medios audiovisuales y que después se dedicará a realizar contenido para plataformas digitales y redes sociales.

Con una autoentrevista en la que detalló situaciones que experimentó a lo largo de su vida, el conductor presentó un programa que emulará al ciclo de reportajes íntimos que llevó adelante en Rock&Pop en la década del '90: estará despojado de polémicas en torno a la política y conversará con "gente común con historias especiales". 

Entre otras aristas, rememoró que en la casa de su infancia tenía enormes carencias, recordó que se enteró de que era adoptado a los 56 años -y que, después de analizarlo en varias oportunidades, decidió no buscar a sus padres biológicos- y que el mes pasado, cuando estuvo internado en el Hospital Universitario de la Fundación Favaloro, permaneció cuatro días dormido

"Estuve complicado: hubo como cuatro días donde no me despertaba. Ahí se preocuparon todos, pero zafé", relató. 

Como si fuera un psicólogo, el editorialista profundizó en aspectos de la sociedad y reflexionó sobre los miedos que afrontan las personas. "A la gente le cuesta mostrarse vulnerable y mortal", consideró. Luego, en otro pasaje de la entrevista -frente a un espejo-, añadió: "La gente vive llena de miedo a que le vaya mal. La mayoría, por miedo a fracasar, no triunfa".

En su mónologo, que estuvo cerca de los 3 puntos de rating y se convirtió en primera tendencia en Twitter, aseguró que en la televisión "casi todo el mundo miente" y que en su programa los políticos no tendrán lugar porque "van a salir hasta por debajo de las baldosas para todos decir la misma puta obviedad".