El esquema defensivo y compacto que presentó la modesta pero sólida Selección de Islandia ante Argentina atentó directamente contra un juego fluido y dinámico que permitiera varias situaciones de peligro en ambas áreas.

Sin embargo, el penal que Hannes Thór Halldórsson le atajó a Lionel Messi, y los goles de Sergio Agüero y Alfred Finnbogason en la primera parte condimentaron un debut amargo para Argentina y épico para Islandia.