El "viejo" Roberto Lavagna que rechazaba una candidatura presidencial quedó atrás. Hay un "nuevo" Lavagna, que da entrevistas, multiplica reuniones, busca sumar nuevos adherentes a su propuesta y empieza a pensar seriamente en presentarse como candidato que aglutine la máxima cantidad de votos en ese crisol político que es el "tercer tercio" distante del macrismo y el kirchnerismo.

Anoche, el exministro de Economía visitó la casa del presidente de San Lorenzo, Matías Lammens, a la que fue invitado a cenar junto a su hijo, Marco, actual diputado nacional. De la velada participó también el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, cada vez más embanderado con la propuesta de Lavagna presidente.

Lammens tiene decidido meterse en política y hacerlo desde la Ciudad de Buenos Aires, pero todavía no definió cuándo. Podría ser este mismo año, si consigue conformar un espacio que le haga competencia al oficialismo de Horacio Rodríguez Larreta. Una apuesta similar a la que en 2015 hizo Martín Lousteau, hoy incorporado 100% a las filas de Cambiemos, aunque con la intención de competir en las primarias. 

Los asistentes notaron que el economista estaba distinto, más animado a jugar si se da el contexto. En ese sentido, todos coincidieron en la necesidad de ampliar el volumen político y electoral de una tercera alternativa, que hoy encarna Argentina Federal pero que podría terminar absorbiéndola, si los peronistas disconformes con Cristina no logran seducir a una porción sustancial del electorado.

De los cuatro fundadores de ese espacio, el que mejor mide es Sergio Massa, cuyo deseo es ser presidente pero al que muchos ven como candidato a gobernador de Buenos Aires. El trío Lavagna presidente - Massa gobernador y Lammens jefe de Gobierno es una de las alternativas en discusión. También hay posibles vices: Lifschitz, Stolbizer y una mujer todavía no definida -que podría ser una economista-, respectivamente.