Autorizaron un aumento del 1,7% en las tarifas de transporte y distribución del gas desde marzo
Los nuevos cuadros de las empresas fueron aprobados por el ENARGAS, permitiendo adecuaciones transitorias en las boletas del servicio. Se da en el marco de la emergencia energética que rige hasta el próximo 9 de julio.
Mediante una serie de resoluciones a cargo del Ente Nacional Regulador del Gas (ENARGAS) publicadas este jueves en el Boletín Oficial, el Gobierno autorizó un aumento del 1,7% en las tarifas de transporte y distribución de gas natural para marzo, en el marco de la emergencia energética prevista hasta el 9 de julio próximo.
Así, los nuevos cuadros de las empresas fueron aprobados por el organismo, lo que permite adecuaciones transitorias en las boletas del servicio, luego de las audiencias públicas de febrero último en las que se debatieron la Revisión Quinquenal Integral (RQI) y los planes de inversión hasta el 2030.
Las normativas emitidas le conceden al interventor del ente, Carlos Casares, las facultades para "realizar el proceso de revisión tarifaria" y establecer que "hasta tanto culminara dicho proceso podrían aprobarse adecuaciones transitorias de tarifas y ajustes periódicos".
Así, el valor del gas natural quedó pautado en USD 3,085 el millón de BTU (sigla en inglés de Unidad Térmica Británica). En tanto, la cotización más elevada corre para los clientes de Distribuidora Gas Cuyana, con una cifra que se alcanzó USD 3,148.
Respecto al Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST), el precio para los usuarios residenciales que no poseen subsidios será de $120,18 por metro cúbico.
Estas cifras corresponden al costo que deben afrontar los consumidores de altos ingresos (Nivel 1) junto con los comercios e industrias, mientras que los hogares de recursos considerados bajos (N2) y medianos (N3) contarán con una bonificación del 65% y 50%, respectivamente. Además, influirán la zona y la región para definir los cargos en las boletas.
El Gobierno también mencionó que el ministro de Economía, Luis Caputo, trasladó a la secretaría de Energía el objetivo de "mantener los precios y tarifas del sector en valores reales lo más constantes posibles, y de evitar así un proceso de deterioro que no permite el sustento" de los operadores de la industria en cuestión.