El ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, le dio finalmente el adiós al secretario de Trabajo, Jorge Triaca. Aunque recién se irá dentro de dos semanas, después de la cumbre del G20, Triaca estuvo este mediodìa junto a Sica en la conferencia de prensa en el Palacio de Hacienda, donde se confirmó que no será reemplazado por nadie: el ministro asumirá la conducción total.

Al tomar la palabra, el saliente secretario explicó que sentía "la necesidad de dar un paso al costado" porque se trata de "un cargo con mucha tensión". "El proceso de toma de decisiones a veces te hace ver que hay que volver. Es el momento para dedicarme a mi familia", agregó, y le agradeció al presidente Mauricio Macri. Sica le devolvió la gentileza y dijo que "es un momento triste".

La concentración de todas las facultades de la secretaría de Trabajo es una cuota más en la acumulación de poder de Sica, luego de la reestructuración de ministerios que lo había colocado por encima de Triaca y del secretario de Agroindustria, Luis Etchevere, que también quedó en la mira.

Tras conseguir frenar lo que hubiera sido el quinto paro nacional de la CGT contra Cambiemos, el ministro de Producción logró convencer a Macri de desplazar a Triaca y, aunque por ahora no ejecutará ninguna acción en ese sentido, planea hacer lo mismo con Etchevehere en el futuro. No quiere que nadie le haga sombra.

La incertidumbre pasa ahora por cuál será el futuro de Triaca, a quien le ofrecieron el cargo frente a la embajada en el Vaticano. Hoy, de hecho, confirmó que habló con Marcos Peña sobre esa posibilidad, pero aclaró que "no fue más que eso" y que, por ahora, no hay nada firme.

El ex diputado nacional que había quedado golpeado por el escándalo que se generó luego de que una empleada suya lo acusara de maltrato. La polémica escaló cuando se conoció que había sido nombrar por la intervención del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU). Además, nunca logró una buena relación con los gremios.