En el tramo final de la campaña electoral, Hernán Lacunza volverá a Washington para participar de las reuniones anuales del Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial. El desembolso pendiente de U$S 5.400 millones y la reestructuración de la deuda regirán la agenda.

El ministro de Hacienda viajará a los Estados Unidos junto a Guido Sandleris. Pese a que no hay encuentros confirmados, se estima que Lacunza se verá las caras nuevamente con Kristalina Georgieva, la directora del FMI. En el primer contacto que tuvieron, hace tres semanas, la reemplazante de Christine Lagarde aseguró que Argentina "está en el tope de prioridades" del organismo.

Fuentes del Ministerio de Hacienda le confirmaron a El Canciller que el secretario de Finanzas, Santiago Bausili, volará hacia el país norteamericano el lunes en representación de Lacunza. También lo hará Sebastián Katz. Ambos encabezarán una nueva misión técnica, con destino a la sede del organismo de crédito internacional en la capital estadounidense.

El titular de la cartera económica arribará el jueves. Desde Hacienda indicaron que hay varias reuniones pactadas con ejecutivos de las finanzas. Todas las delegaciones del G20 dirán presente en las Asambleas.

U$S 5.400 millones pendientes y reestructuración

En la última reunión que el director interino del FMI, David Lipton, mantuvo con Lacunza, Sandleris y Mauricio Macri en Nueva York, quedó claro que la entidad monetaria no hará ningún movimiento hasta que culmine el proceso electoral.

"La Argentina cumplió con sus compromisos en materia monetaria y fiscal, eso se dio por sentado en la reunión", explicó Lacunza tres semanas atrás, en referencia a la obtención de superávit fiscal primario y el mantenimiento promedio de la base monetaria.

lacunza sandleris
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En Nueva York, el ministro de Hacienda también había mantenido reuniones con acreedores, con los que tanteó las posibilidades de una renegociación de la deuda. Al retornar de Estados Unidos, envió al Congreso el proyecto de ley para reperfilar la deuda pública bajo legislación nacional, por una suma de U$S 32.000 millones.

Desde Hacienda afirmaron a este medio que Argentina no corre riesgo de entrar en default. "Habrá una extensión de plazos voluntaria, market-friendly, una mirada amigable en términos de negociación. Así, el país no tendría inconvenientes en su programa financiero del 2020 y 2023", concluyeron.