En la madrugada del jueves los senadores de las provincias votaron una ley que decide que lo "justo" es que CABA y la provincia de Buenos Aires vuelvan a pagar un tercio o un cuarto de lo que pagan sus co-provincianos por los servicios. Algo que en un país normal ocasionaría que esos senadores no puedan volver nunca más a vivir a sus provincias.

Los senadores le tiraron una pelota de miles de millones de dólares al estado nacional (o sea, al país) para dar un paso más en el objetivo de que este gobierno no termine el mandato. La última vez que el peronismo hizo lo mismo dejó mas del 50% de pobres en 2001, pero no les importó porque el político peronista es, de forma unánime, siempre de clase alta y no sufre nunca en carne propia los golpes de estado que arma.

Los senadores le tiraron una pelota de miles de millones de dólares al gobierno (o sea, al país) para dar un paso más en el objetivo de que no termine el mandato.

En este escenario cae Marce Tinelli, como candidato a Presidente de la Nación Argentina, ideado por el Cabezón Duhalde. Tinelli, a sus casi 60 años, tiene la liviandad de sus shows, flotando como una hojita seca en raros pozos de aire.

Y aunque comenzó metiendo guita en ideas como comprar clubes inviables de la segunda división de España o llenar de billetes al club de su pueblo natal sin tener ganancias, en su última fase decidió dejar de perder dinero y se asoció en varios negocios millonarios al testaferro de los Kirchner, el actual preso Cristóbal López, que se robó US$1000 millones de aportes a la AFIP.

Con este currículum, Marce salió a pedir que lo pidan de Presidente. Nos entregó en una entrevista un poco del actual discurso kirchnerista apuntando que la cosa "no da para más", que la gente no tiene plata en los bolsillos y que ponerle un número a la pobreza es estigmatizante.

Esa liviandad de conceptos en la vida, sus shows, sus inversiones y su "plan" de país imprime su figura como la ideal para que el peronismo se una a él.

Esa liviandad de conceptos en la vida, en sus shows, en sus inversiones y en su "plan" de país imprime su figura como la ideal para que el peronismo se una a él como los vagones de atrás del próximo saqueo. El saqueo por el que ya se están arremangando a través del default que van a anunciar apenas asuman, si es que logran romper una vez más el orden democrático.

No se debería tomar en serio esta postulación delirante. Pero en Argentina todo lo que no hay que tomar en serio, se toma en serio; y cualquier fenómeno que sea delirante en política, tiene pista para despegar. Así, con la liviandad de Marce, todo el país aguarda expectante, con una genética sadomasoquista extraterrenal, cómo se acerca otro golpe en la cara para seguir hundiéndose en la miseria. Miseria económica y cultural.