La maldición de Interlagos, circuito en el que a principios de este mes debió abandonar tras accidentarse en medio de un diluvio, se trasladó este sábado a Nevada, donde Franco Colapinto volvió a chocar en un intento al límite por pasar a la Q3 del Gran Premio de Las Vegas y comprometió seriamente, a juzgar por los severos daños que sufrió su Williams, sus posibilidades de largar el domingo en la que sería su séptima carrera en la Fórmula 1.

Después de una jornada de ensayos libres complicada para todos por las condiciones del circuito callejero -sucio y con poco grip-, en el que desempeñó una labor de menor a mayor -fue 17°, 18° y 8° en las tres tandas-, el piloto argentino logró meterse en la Q2 sobre el filo del tiempo al concluir noveno en la Q1. 

Quedaron eliminados en esa instancia apellidos fuertes de la máxima categoría del automovilismo mundial: su compañero de equipo, el tailandés Alex Albon, el español Fernando Alonso (Aston Martin), el mexicano Sergio "Checo" Pérez (Red Bull), el finlandés Valtteri Bottas (Sauber) y el canadiense Lance Stroll (Aston Martin).

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La segunda tanda de la clasificación fue de alto vuelo. En una noche fría, la pista de 6,2 kilómetros de "La ciudad del pecado" fue mejorando sus condiciones de adherencia con el paso del tráfico y de los minutos, lo que obligó incluso a los pilotos mejor clasificados a emplearse a fondo para mejorar sus tiempos en su afán de asegurar su pase a la Q3.

Esa fue la trampa en la que cayó el oriundo de Pilar. Cuando vio que quedaba afuera de esta última etapa de clasificación, Colapinto arriesgó, llevó su Williams y su conducción al extremo y, literalmente, destruyó el monoplaza a la salida de la curva 16, después de que uno de sus neumáticos rozara el muro de contención. 

El piloto de 21 años se dio un golpazo, pero, aparentemente, no sufrió lesiones. Con una cara que denotaba bronca y angustia, el argentino subió a un auto con personal médico y dejó en soledad a su FW46, hecho trizas.

A estas alturas resulta una incógnita saber si los mecánicos de la escudería inglesa con sede en Grove alcanzarán a reparar los daños del vehículo para que Colapinto consiga estar presente en la carrera de este domingo, que se iniciará a las 3 (hora de Argentina).

La "pole position" quedó en manos del británico George Russell, que marcó con su Mercedes un tiempo de 1:32.312, seguido por el español Carlos Sainz (Ferrari). El neerlandés Max Verstappen (Red Bull), quien en este Gran Premio podría consagrarse por cuarta vez consecutiva campeón mundial de la Fórmula 1, largará quinto, justo adelante de su máximo contendiente, el también británico Lando Norris (McLaren). La sorpresa fue el francés Pierre Gasly, que con Alpine partirá en la tercera posición.