Proveniente del ámbito privado y con un alto perfil empresarial, Javier Iguacel, el nuevo ministro de Energía y Minería de la Nación, en reemplazo de Juan José Aranguren, irrumpió en el sector público con su denuncia judicial por irregularidades y sobreprecios en las obras públicas de Santa Cruz, que apuntó directamente a Cristina Fernández de Kirchner, Julio De Vido y José López, entre otros.

La denuncia, que fue radicada en el Juzgado Criminal y Correccional Federal N°10 a cargo de Julián Ercolini, también cargó contra su antecesor, Nelson Guillermo Periotti, y el subadministrador, Javier Alonso, y prueba sobreprecios por una cifra que asciende a los $20 mil millones. Sin embargo, sospecha que este mecanismo de defraudación a las arcas del Estado se replicó en diferentes provincias.

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El ingeniero en petróleo egresado (con mejor promedio histórico, 9,80) del ITBA de 43 años llegó a ser titular de Vialidad Nacional, dependencia del ministerio de Transporte que conduce Guillermo Dietrich, luego de presentarse como candidato por Cambiemos a la intendencia de Capitán Sarmiento, Provincia de Buenos Aires.

Su irrupción en el sector público fue un breve paso por YPF (1997-99), donde renunció el mismo día que la empresa fue adquirida por Repsol por no estar de acuerdo con esa decisión y creer que tenía que ser del Estado, algo que le transmitió en una carta a Roberto Monti, por entonces Presidente de la compañía, y lo que le valió un pasaje a Buenos Aires para conocerlo.

Con estos valores, Iguacel desembarcó en el ámbito privado para un ininterrumpido ascenso de 16 años por empresas petroleras como PeCom Energía (propiedad de la familia Pérez Companc) y PlusPetrol, una de las compañias más importantes en exploración y producción de petroleo y gas, con una fuerte presencia en nueve países (Argentina, Venezuela y Estados Unidos, entre otros).

Luego de ofrecerle un alto cargo en una de sus subsidiarias en Angola, donde residió 4 años, PlusPetrol lo nombró vicepresidente de la empresa, cargo al que renunció -pese a la negativa de sus familiares- para dedicarse a la política porque "no le gustaba el rumbo que estaba tomando el país y quería hacer algo para modificarlo", confió el director general de Relaciones Institucionales de la DNV a Chequeado.

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Como titular de Vialidad Nacional, Iguacel se destacó por ser el artífice de un ahorro de US$2.600 millones de dólares para el Gobierno con las ofertas económicas en el marco del programa de Participación Público Privada (PPP) para obras públicas.

Y en el último tiempo, también fue protagonista por ser víctima de un hecho lamentable. El 5 de junio Iguacel sufrió un ataque mafioso en el edificio de Vialidad Nacional, ubicado en el microcentro porteño, donde apedrearon y dispararon contra su oficina, en lo que pudo haber sido una tragedia de no ser porque, minutos antes, se había retirado del lugar para dirigir una reunión en una sala vecina.