Según el último informe del Ministerio de Salud, son 97 los casos confirmados de coronavirus en Argentina. En su mayoría, se trata de personas que viajaron al exterior y regresaron con el virus al país. Los restantes, se infectaron luego de mantener algún tipo de contacto directo con estos primeros casos, situación que se denomina de contagio "estrecho".

El contagio "estrecho" permite aseverar la circulación del coronavirus en Argentina, y puede ocurrir en quienes permanecieron a menos de dos metros de un caso "importado". El primer contagio local de este tipo se confirmó el pasado 12 de marzo.

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Por el momento, no hay ningún caso "autóctono" en el país. Estos son aquellos en los que no es posible identificar el origen del virus en una persona. En Brasil y Chile ya se registraron este tipo de contagios.

Los gobiernos están focalizados en evitar el avance de la epidemia, por lo que extreman cada vez más las medidas en sus respectivos países, ya que buscan evitar que se produzcan los casos "autóctonos", que son los que podrían generar una "transmisión comunitaria" (tal como lo define la OMS) muy difícil de controlar.

Para limitar la propagación de la enfermedad, la clave está en medidas que lleven a la contención. Debido a que no existen vacunas para prevenir el coronavirus, ni terapias específicas para tratarlo, la contención se realiza a través de intervenciones de salud pública.

Ante la situación de posible contagio de coronavirus, las disposiciones gubernamentales radican en el aislamiento preventivo, el distanciamiento social, el lavado frecuente de manos, toser o estornudar sobre el codo, no tocarse la cara, ventilar y desinfectar ambientes y productos.