El consumo interno atraviesa un momento crítico. La recesión económica sin fecha de vencimiento y los altos indices inflacionarios tienen su correlato en las compras en autoservicios, que en enero cayeron por séptimo mes consecutivo. 

Según divulgó el Indec, en enero las ventas en supermercados disminuyeron un 10,5% interanual y acentuaron la merma que habían reflejado en diciembre (-8,7%). En los mayoristas, la retracción fue más pronunciada: se retrajeron un 15,2% interanual.

En el mismo mes, las ventas en shoppings reflejaron una caída del 15,1%, más de 2500 comercios minoristas cerraron sus puertas en el Área Metropolitana de Buenos Aires, el patentamiento de autos 0 kilómetro plasmó una merma interanual superior al 50% y el de motos un descenso del 44%.

La contracción en la actividad comercial se tradujo también en un aumento de la desocupación en los centros de compras (-2,8% interanual), en sintonía con un informe del Ministerio de Trabajo y Producción que consignó que entre noviembre, diciembre y enero fueron registradas 7.666 desvinculaciones sin causa, lo que significa 90 despidos cada 24 horas.

Por otra parte, el presidente de la Unión de Kioskeros de la República Argentina informó en Radio Con Vos la gravedad de la situación de su sector y aseguró que están recurriendo a segundas y terceras marcas para poder vender. "Estimamos que en los primeros seis meses del año van a cerrar 10.000 kioskos", sostuvo Adrián Palacios. 

En este contexto, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa -CAME- manifestó su repudio por el cobro anticipado de Ingresos Brutos a las operaciones con tarjetas. En enero, las compras con tarjeta de crédito se contrajeron un 20% en pesos y un 50% en dólares.